Los daltónicos no pueden ser bomberos, policías o pilotos. Y es que se enfrentan a una enfermedad que no solo les provoca frustraciones sociales y profesionales, también pone en peligro su propia vida.
Para ayudar a los 350 millones de personas que sufren daltonismo en todo el mundo, McCann y ColorAdd han lanzado una herramienta que les permite diferenciar los colores, sin importar su idioma. Se trata de un código de colores, similar a un alfabeto o al código Braille, que dirá al daltónico si se encuentra ante el rojo, el verde o el azul. Para ello, los colores simples se representan mediante un símbolo, mientras que los complejos se forman con la unión de varios símbolos.
Además, el alfabeto de ColorAdd está disponible como un código impreso en todo tipo de objetos de uso cotidiano para que las personas daltónicas puedan identificarlas a la hora de usarlas. Por otro lado, también podrán reconocer los colores a través de una aplicación para móvil que los identifica y los traduce.
La idea ya ha sido reconocida internacionalmente llegando a ser premiada por la ONU por su capacidad para reducir la desigualdad. De hecho, en Oporto ha posibilitado los viajes en metro sin confusiones. También se ha incorporado en marcas de lápices, está presente en hospitales, en etiquetas para la ropa e, incluso, en juegos para niños.