En 2013 la compañía tailandesa de telefonía móvil TrueMove conmovía al mundo con un spot cuyo claim era “Dar es la mejor forma de comunicación”. Una frase que se convertía en el nexo de unión entre la razón de ser de la empresa y el “cortometraje” de tres minutos donde la imagen corporativa de la compañía no aparecía por ningún lado.
Dos años después, True Move recurre de nuevo a este formato cuasi-cinematográfico en el que las emociones vuelven a jugarun papel trascendental. Esta vez, la historia gira en torno a una mujer que visita a una anciana tailandesa que ayudó a su padre cuando era prisionero de guerra durante la Segunda Guerra Mundial. El escenario hace referencia al campo de Kanchanaburi, un lugar en el que los japoneses obligaron a los prisioneros a construir un puente ferroviario sobre el río Kwai.
El spot, que pretende mostrar cómo un desinteresado acto de compasión puede cambiar la vida de una persona, se engloba dentro de la campaña “El verdadero significado de dar”. Una acción que además está respaldada por un grupo de organizaciones benéficas de Tailandia.
El claim “La compasión es la verdadera comunicación” vuelve a ser la única conexión que la pieza tiene con la telefonía. Una dinámica que parece haberse convertido en una constante para TrueMove en favor de publicidad más emotiva.
Y es que precisamente la emoción parece ser el recurso preferido por los publicitarios tailandeses. Una tendencia que ya se pudo ver en las obras de Ogilvy&Mather Bangkok para la compañía de seguros Thai Life Insurance en 2014 con “Unsung Hero” y a principios de este año con “Garbage Man”.
Miles de usuarios son partidarios de estos anuncios en los que la lágrima fácil está más qe asegurada. De hecho, y como aval de esta afirmación, el nuevo spot cuenta con más de un millón y medio de visitas en YouTube y con sólo 38 opiniones negativas. ¿Qué opináis vosotros de este tipo de publicidad?