Los toldos rojos de Coca-Cola se han convertido en un elemento más del paisaje urbano en México. Han dado sombra a las historias de varias generaciones y representan el vínculo entre los pequeños negocios y una marca que lleva casi un siglo operando en el país. Por ello, Coca-Cola ha querido hacerles un homenaje en su nueva campaña y se ha comprometido a renovarlos.
La campaña refleja el vínculo de Coca-Cola con la cultura local y los pequeños comercios
Este es el concepto creativo de “Sombras de rojo”, trabajada por las agencias WPP, David Miami y David Madrid, que celebra la historia de la marca en el país a través de su presencia en puestos, abarrotes, changarros, tienditas y taquerías. Coca-Cola México reivindica así su conexión con la cultura nacional a través de las historias y experiencias de los propietarios de los comercios.
“Bandera de cada barrio. Ese color ya no es nuestro; le pertenece a los puestos, abarrotes y changarros. Aunque seas todo desgarros y este día te retiremos, seguro te vemos luego", comenta la emotiva narración en verso de la pieza audiovisual de la campaña. "Hoy es la última vez que subes, pero cuando llegue el lunes, te bajaremos de nuevo. Gracias tienditas, abarrotes, taquerías, por darle tanto techo a nuestras vidas”.
La acción comunica el compromiso de Coca-Cola de renovar toldos brandeados a lo largo del país para reforzar su alianza con los pequeños negocios de México. La marca asegura que se trata de una “renovación de sus votos” con miles de tiendas del país. “Coca-Cola no sería parte de México si no fuera por todas las tienditas que lo llevan por bandera. Gracias a ellos somos parte de cada colonia del país”, explica en redes sociales. “Celebremos todos aquellos toldos, que aunque no se vean tan nuevos, se ven muy Coca-Cola”.
“Sombras de rojo” se ha activado en redes sociales, donde la marca ha dedicado una serie de publicaciones a las diferentes historias de los negocios que han lucido el color y logotipo de Coca-Cola en sus toldos. Así, retrata el abarrote Samire, la tienda Ramoncita o la carnicería Santa María, entre otros, en fotografías que reflejan cotidianidad y muestran el omnipresente toldo de Coca-Cola recogiendo sus relatos.
“Gracias por ser testigo de nuestra gente y hacer de nuestra marca parte de este país”, le dedica Coca-Cola al negocio Miscelánea Miniatura. En todos estas publicaciones, la marca mantiene un tono humano y cercano que presta atención a los detalles más nimios de las vidas de los dueños de los negocios. “Medio chueca, pero esta tela roja ha aguantado viento, lluvia y sismos… en ‘Don José' el toldo no se sube hasta que no está todo recogido”, apuntan.
La marca también presta atención a otros toldos que utiliza para hacer énfasis en su mensaje y en el legado que transmiten a través del desgaste. “Hay mil historias debajo de cada toldito de Coca-Cola de nuestro país, primeros besos, últimas rondas, y muchos chismes... Si este toldo hablara seguro que tendría mucho que contar”, dice la marca.
“Nos sentimos honrados de celebrar a las pequeñas empresas que han estado en el corazón de la historia de Coca-Cola durante generaciones”, ha explicado Islam ElDessouky, Vicepresidente Global de Estrategia Creativa y Contenido en Coca-Cola, en una publicación de LinkedIn. "Estos toldos en todo México simbolizan momentos compartidos, tradición y comunidad: esta campaña es nuestro tributo a aquellos que hacen de Coca-Cola una parte de su cultura local y vida diaria".
La campaña llega tras un periodo de conflicto para la marca en el país, en el marco de las políticas económicas y migratorias de la administración de Donald Trump. La compañía ha experimentado intentos de boicot por parte de la población a través del movimiento “Latino Freeze”, que invitaba a dejar de consumir productos y marcas que consideran contrarias a los latinos y migrantes.