Melissa S McCracken ha apostado por un nuevo concepto de arte en honor a las personas sinestésicas que perciben sabores según las texturas que tocan o escuchan colores.
Y es que lejos de verlo como un problema, esta artista ha decidido explotar todo su potencial por contemplar la sinestesia no sólo como un don, sino también como un complemento perfecto para percibir el mundo de la forma más vibrante posible.
Escucha música a través de pinturas y para poder cantar todas estas canciones que ha seleccionado en una nueva obra, McCracken ha diseñado estos cuadros para las personas sinestésicas, personas cuya peculiaridad se centra en ver la música, tocar la tristeza y oler los colores.
De hecho, la sinestesia es descrita por los neurólogos como una comunicación anómala entre áreas cerebrales. Lo más común es que se crucen los estímulos léxicos (letras, números o palabras escritas) con los colores, de forma que el sinésteta léxico ve los grafemas de un determinado color.
También es bastante frecuente que el sinésteta vea colores y formas cuando escucha ciertos sonidos (sinestesia musical). Y este es el caso que hoy, desde Reason Why, os queremos mostrar.