La nueva Directiva Europea sobre Productos del Tabaco, que prevé duplicar las advertencias sanitarias en las cajetillas, entra en vigor el próximo 20 de mayo. Y las tabacaleras ya se están preparando: tienen un periodo de un año para que fabricantes y minoristas agoten existencias de las antiguas cajetillas.

Aunque la medida no gusta a la Mesa del Tabaco. Y es que en las nuevas cajetillas deberán incluir advertencias que ocupen el 65% de la superficie del packaging (hasta ahora ocupaban el 40%) y no en la parte inferior, sino en la superior de ambas caras y en el 50% de los laterales. Además, se incorporará un mensaje sobre el fondo amarillo con una dirección web de ayuda para dejar de fumar. También se incluyen tres nuevos juegos de pictogramas que deberán ir rotando.

El packaging genérico se rechaza por “ineficaz”

El packaging genérico podría haber sido una solución. Sin embargo, para la Mesa del Tabaco eso habría supuesto “abrir la puerta a la falsificación y al contrabando de productos sin control sanitario”. Y es que con la nueva medida, se reduce el poco espacio que quedaba reservado a la marca “y, por tanto, el derecho de información del consumidor con un producto legal”, según ha explicado su portavoz, Juan Páramo. Y la marca juega un papel fundamental. 

“Si se minimiza o se pierde su valor, una primera consecuencia es que el precio se convierte en el principal elemento de la decisión de compra del consumidor que probablemente se decante por marcas más baratas. Si ello ocurre, habrá una pérdida de valor en cada eslabón del sector sin que por ello se consiga el objetivo de reducción del consumo, especialmente entre menores”, ha añadido Páramo. Y es que a su juicio, supondría un “ataque sin precedentes a un sector legal e hiperregulado porque expropia de forma injustificada” a las marcas comerciales.

Pero el valor de la marca de las tabacaleras no parece ser tal en otros países como Francia donde el tabaco sin logotipo llegaba a principios de abril. Reino Unido era más precoz y aprobaba las cajetillas sin marca a mediados del mes de marzo.

En España, el tabaco es uno de los productos con mayor regulación y, además, se trata del producto más agravado. De hecho, el 80% del precio de una cajetilla corresponde con impuestos. Sin embargo, el packaging genérico no tiene la batalla perdida en España. Sanidad señala que es “una opción que se habrá de estudiar en el futuro”.