A pocas personas les preguntarás por Ikea y no sabrán de qué les estás hablando. Y es que nuestras retinas se han acostumbrado tanto a los colores azul y amarillo de su logo, que casi se han convertido en un sinónimo de muebles de nombres impronunciables fáciles de montar.
Algo de lo que la compañía se enorgullece y no tiene miedo a parodiar.
Pero, ¿qué pasaría si Ikea rediseñara su logo?
Una pregunta que se han hecho en Reathink feature de Icon Magazine y no han querido dejar sin respuesta. Por ello, le pidieron a Freytag Anderson que se atreviera con un rediseño y este ha sido el resultado:
“Empezamos prestando atención a las mejores partes del logo. El color de las letras y la negrita. Pero hemos perfeccionado la tipografía alineándola con la original fuente Futura Press, evitando Verdana a toda costa. Creemos que este tratamiento tipográfico más limpio se adapta mejor a la estética de los productos de Ikea. Del mismo modo, al continuar usando los colores de la marca nos aseguramos de que el logotipo siga siendo identificable”.
Además, en el prototipo se ha eliminado el óvalo. Un objetivo que se marcó Anderson para darle más legibilidad en las escalas más pequeñas como las utilizadas en publicidad, en la web o en los contenidos de mobile.
Aunque la legibilidad no es la única ventaja del nuevo diseño. Como si de cubos independientes sacados de un juego de construcción se tratara, cada letra puede cambiar su posición. Así las opciones se vuelven ilimitadas y traen a la memoria aquellas instrucciones incomprensibles que podemos encontrar en cada caja de Ikea. Quizá, como con sus muebles, haya que empezar a montar para empezar a entenderlas...
Así cada uno de los productos que parecen diseñados para complicarnos la tarde del domingo pero que tanto nos gustan podrían tener su propio logo.
Sugerencia: ¿por qué no ponerlos en función de la dificultad del montaje del mueble en cuestión? Cuanto más difícil de “desencriptar” sea el logo, más deberíamos echarnos a temblar...
El problema viene cuando aplicamos el nuevo diseño a los establecimientos. Según dónde nos situemos podremos ver el logo completo o no.
Ahí ya deberíamos sopesar si de verdad Ikea quiere que se le asocie con un concepto con partes montables o si debe primar la unidad. Aunque la idea de la construcción por partes va muy en línea con su catálogo de productos...
Puede que Ikea no esté relacionada con este proyecto, pero parece que se le ha dado mucho sobre lo que pensar. ¿Nos sorprenderá pronto?