Un salón sin televisión es algo inconcebible para muchos. Entre ellos, Alicia Fernández Oteo, Marketing Responsible & Business Analyst en Philips TV (TP Vision), con quien hemos hablado sobre la importancia de esta división en la compañía. También nos ha contado qué innovaciones están llevando a cabo en Philips para mantener su cuota de mercado en España.
P. Philips es una compañía con mucha historia y patas de negocio muy distintas. Háblanos de la parte de TV (TP Vision), ¿a qué target se dirige y cuál es su core business?
R. Nuestro core son las televisiones, pero siempre decimos que estamos orgullosos de contar con un portfolio muy completo. Tenemos desde el televisor de 22 pulgadas hasta el Oled Plus. Es una gama tan completa, que resulta inevitable que el target sea muy variado: unos buscan algo más asequible y otros, tecnología al alcance de su mano. El punto común entre ambos es que nosotros ofrecemos diseño en todos los modelos. Y la calidad de imagen, que es nuestro mayor claim e innovación. Así, cuando compras una televisión de Philips sabes que es lo mejor que puedes obtener a ese precio.
Cuando compras una televisión de Philips sabes que es lo mejor que puedes obtener a ese precio.
P. ¿Es TP Vision otra aportación de Philips a la creación de los hogares inteligentes del futuro?
R. Todas las unidades de negocio de Philips aportan su granito a los hogares inteligentes. Y desde nuestra división intentamos que la televisión sea el hub de la casa y desde ahí el usuario pueda controlar la luz, el termostato, la seguridad… Somos compatibles con Google Home y Alexa, porque
todos estos dispositivos que van surgiendo son más complejos de usar si no están agrupados en un mismo lugar.
P. Hablando de hogares inteligentes, ¿son mito o realidad?
R. Todavía hay un desconocimiento sobre lo que pueden aportar y la gente no entiende la verdadera necesidad. Muchos se preguntan, ¿por qué no me puedo levantar yo y regular el termostato?, por ejemplo. Creo que es un avance que va a costar que penetre, pero al final acabará llegando y pasará como sucedió con los teléfonos móviles. España no va a ser pionero en hogares inteligentes, pero acabará penetrando.
P. Cada vez se ve menos televisión tradicional y más contenido on demand. ¿Qué diferencia hay entre ver una serie en una tablet o en una televisión Philips?
R. Hay diferencias obvias, como las pulgadas o la calidad de imagen y sonido. Pero lo principal es el tratamiento de la imagen gracias al procesador que tiene la televisión. No es lo mismo recibir señal de TDT que Netflix en 4K, así que es importante tratar la fuente porque no siempre recibimos el contnido en las mismas condiciones. El contraste, el movimiento..., es importante tratarlo todo bien, y esto lo hace el procesador de la televisión.
No siempre recibimos el contenido en las mismas condiciones, por eso es tan importante el procesador de la televisión.
P. Con wifi, táctil, reconocimiento de voz… ¿Cómo crees que será la televisión del futuro?
R. Todo va muy rápido en lo que se refiere a desarrollo tecnológico. Sabemos que vamos hacia una televisión más fina, con más definición... Pero eso es lo menos importante. Lo que todos esperamos de la televisión del futuro, y donde se invierte I+D, es que satisfaga las necesidades del consumidor. Ahora por ejemplo la televisión es también un ordenador. Así que debemos lograr que el usuario llegue a casa, se siente en el sofá y tenga todo lo que espera encontrar. Es más el concepto de Smart TV lo que va a imponerse.
P. Un salón sin televisión para ti es….
R. ¡Un jardín sin flores! Un salón es un espacio de convivencia, familiar..., y la televisión ayuda a encontrar ese entretenimiento para toda la familia ofreciendo la posibilidad de ver series, fotos, jugar a juegos... La gente que no tiene televisión en el salón no sé muy bien que hace, porque para mí es una parte súper importante.
P. ¿Cómo crees que afecta la segunda pantalla al consumo de televisión?
R. El pánico de la segunda pantalla lo tenemos hace años y eso ha obligado a toda la industria a replantearse el modelo de entretenimiento. Porque es una realidad, todo el mundo hace segunda pantalla. Y la televisión se ha adaptado intentando interactuar con el espectador, yo creo que con éxito, mediante hashtags, votaciones... Incluso han surgido aplicaciones para comprar la ropa de los presentadores. Al final, la televisión y la segunda pantalla han colaborado, han coexistido, y el pánico inicial se ha nos pasado. Pero hay que seguir buscando formas de comunicarnos con el público.
La televisión y la segunda pantalla han colaborado, han coexistido, y el pánico inicial se nos ha pasado.
P. ¿Cómo de importante es la innovación en una compañía que revolucionó el mercado hace más de un siglo inventando la bombilla en un tiempo en el que el led ya es el rey?
R. La tecnología ha evolucionado más rápido de lo que somos capaces de consumir, así que es importante seguir innovando de manera constante, aunque incluso luego las innovaciones no lleguen al mercado. Hay gente que aún no tiene Full HD y ya estamos con el 4K, e incluso ya se ha presentado el 8K. Creo que no damos timpo a la gente para asimilar todo lo que viene. Y en un producto que no es de primera necesidad, como la televisión, es necesario ofrecer motivos para que los clientes te compren. Porque la mayoría, además, no esperan a que se estropee: simplemente compran otra televisión con mejores prestaciones.
P. La energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma. ¿Es eso lo que ha hecho Philips a lo largo de estos años?
R. En 1948 Philips hizo la primera demo de lo que era un televisor en la Feria de Muestras de Barcelona y seguimos siendo una marca de referencia en el sector. Hemos sabido seguir las tendencias y el mercado no nos ha engullido.
P. En un mercado tan competitivo, ¿es la diferenciación el principal valor a comunicar desde la estrategia de marketing?
R. Nosotros intentamos siempre destacar en calidad de imagen. Pero no es lo mas fácil de comunicar a la hora de diferenciarse, porque es muy subjetivo. Por eso llevamos muchos años con el Sistema Ambilight, que es más visual, más fácil de comunicar y de que llegue al cliente.
P. Se habla mucho de marcas con valores, ¿cuál es el principal que tratáis de transmitir desde tu departamento?
R. La emoción. El poder despertar sentimientos de interés en las personas y emocionarles con nuestros productos y diseños para que se quieran unir a nosotros y eso les aporte algo.