Ocho de cada diez empresarios de España confían en volver a los niveles anteriores a la crisis del Covid-19 antes del segundo semestre de 2021.
Así lo muestra el estudio realizado por la empresa de recursos humanos Randstad, que pone el foco sobre la situación empresarial del país tras la pandemia y las previsiones de recuperación económica y laboral.
La mayoría de empresarios estiman una recuperación total en el último trimestre de 2020 o en el primero del próximo año
En concreto, el 19,5% de los empresarios esperan que sus negocios se recuperen en el primer trimestre del 2021 y el 19,2%, durante los últimos tres meses de este año.
Un 12,1% considera que se demorará algo más, hasta el segundo trimestre de 2021, mientras que los más optimistas ubican la recuperación en el segundo trimestre de este año (4,3%), o en el tercero (9,8%). Es relevante también que el 15,1% de los encuestados consideren que el volumen de ventas de su empresa no se ha resentido notablemente durante esta crisis.
Por otra parte, un 3,2% del empresariado español tiene una previsión algo menos optimista, ya que esperan que la situación no mejore hasta pasado el segundo semestre de 2021. Incluso un 6,5% de los encuestados consideran que el volumen productivo no va a recuperar nunca los valores previos a la crisis.
El estudio de Randstad revela un dato realmente destacable para el ámbito laboral del país: los empresarios contratarán una media de 3,3 trabajadores temporales para reactivar sus negocios durante la recuperación.
“El hecho de que la mayoría de los empresarios de nuestro país confíen en que la actividad de sus empresas se recupere totalmente antes de un año, es una buena noticia entre tantas negativas que hemos sufrido durante esta crisis en lo referente a economía y empleo”, asegura Valentín Bote, Director de Randstad Research, quen confía en que, ante esta situación, “sectores como el turismo y la hostelería sean un espaldarazo para el conjunto de la economía y contribuyan a cierta reactivación del mercado laboral en los próximos meses”.
La recuperación por sectores
El informe también ha realizado previsiones sobre cómo van a evolucionar los diferentes sectores. Por motivos obvios, el sanitario y la industria farmacéutica serán los que experimentarán una recuperación más rápida, estimándose que la mayoría de las empresas alcanzarán la actividad anterior a la crisis antes de los tres primeros meses de 2021.
"Confiamos en que sectores como el turismo y la hostelería contribuyan a cierta reactivación"
En el plano positivo, también destacan otros sectores en los que la mitad de sus empresas comenzarán a trabajar este verano y que rozarán una recuperación del 90% antes del final de 2021. Son los sectores de la contabilidad y servicios jurídicos, los seguros, el comercio al por mayor, la logística, las telecomunicaciones, la agricultura y la ganadería, y las industrias química y alimentaria.
Desde el estudio prevén que sectores como la construcción, el comercio al por menor, la automoción, el transporte aéreo, la hostelería y gran parte de la industria tarden más en alcanzar una recuperación, estirando el plazo hasta entrado 2022.
Los empresarios más optimistas
Randstad también ha tenido en cuenta dónde se encuentra cada empresa para valorar las previsiones de recuperación total. Así, los empresarios más optimistas del país se encuentran en Cantabria, ya que el 92% de estos consideran que la actividad económica volverá a niveles anteriores a la crisis antes de un año, seguidos por los de Navarra (87,5%), La Rioja (86,4%), Comunitat Valenciana (84,8%) y Galicia (84,2%). También por encima de la media nacional (80%) se sitúan Cataluña (83,3%), Euskadi (82,2%), Canarias (81,8%) y Aragón (80,8%).
En la otra cara de la moneda se sitúa Andalucía, donde solo el 64,4% confían en una recuperación total antes de mediados del próximo año. La siguen Extremadura (74,7%), Baleares (74,8%), Castilla y León (75,6%), Castilla-La Mancha (76,5%), la Región de Murcia (78,5%), la Comunidad de Madrid (78,6%) y Asturias (79,3%).
Vuelta al trabajo
El reinicio de la actividad es una cuestión que también divide a los empresarios de nuestro país. Según el informe de Randstad, el 26,6% aseguran que ya han comenzado con su actividad mientras que un 15,3% no saben todavía cuándo se normalizará ya que, recuerdan, depende del levantamiento de las restricciones.
El 13,4% de los empresarios confían en que podrán levantar la persiana con normalidad en el mes de junio, mientras que el 10,6% creen que será posible hacerlo durante el resto del verano, en julio y agosto. También hay una buena parte que creen que la vuelta al trabajo comenzará entre septiembre y final de año (9,8%) o incluso a partir de 2021 (15,2%).
ERTE y teletrabajo
Durante la pandemia, el 30,4% de las empresas han logrado mantener su actividad habitual, aunque llevando a cabo medidas de reestructuración, como el teletrabajo. Un volumen considerable de empresarios (28,6%) se han visto obligados a disminuir su actividad, siendo en la mayoría de los casos (70,8%) una reducción nunca superior al 60%.
Otro tanto (21,3%) han tenido que paralizar de manera temporal su actividad y solo el 1% cerró de manera definitiva. En la otra cara de la moneda, un 11,5% de empresarios no tuvieron que afrontar ninguna medida para continuar con su actividad y, en algunos casos (4%) hasta se experimentó un aumento de la actividad.
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Otras medidas menos habituales han sido otorgar vacaciones (11,5%), la paralización de procesos de contratación (11,2%), o el permiso retribuido recuperable (9,5%). El estudio también destaca que el 4,1% de los empresarios españoles tuvieron que contratar nuevos trabajadores ante el aumento de la producción.
La supervivencia de la empresa
Randstad recalca que los empresarios españoles tienen un panorama complicado en los próximos meses. Estos consideran que los retos más importantes que se vislumbran con la desescalada pasan por gestionar los ERTE y el teletrabajo (58,8%), mantener la empresa operativa (para el 37,1%), evitar pérdidas financieras significativas (34,4%), no perder la relación con clientes y proveedores (30,4%), e invertir en la seguridad sanitaria de sus empleados (28,4%).
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Como principales amenazas e inquietudes de cara al futuro, los empresarios de España señalan la incertidumbre económica nacional (63,5%), la pérdida de facturación (43,7%) y la incertidumbre económica en su sector de actividad (43,1%). Ya como problemas menos importantes se sitúan la incertidumbre política (20,4%), la reducción de la rentabilidad del negocio (19,2%) y los costes laborales (15%).
Para afrontar estos desafíos, las empresas españolas demandan una serie de ayudas por parte del Gobierno y las diferentes administraciones. Las principales son las ayudas fiscales (45,9%), las ayudas económicas directas (37,8%), la flexibilización laboral (29,2%) y el aplazamiento de las cargas fiscales (23,7%).