El pasado 22 de noviembre el Senado desveló su nueva imagen institucional que, entre otras cosas, ha incluido un nuevo logotipo y otros elementos creativos que han sido diseñados especialmente para optimizar la presencia de la Cámara Alta en el entorno virtual. La renovación ha sido recibida con tibieza entre una amplia sección de los usuarios, que consideran el nuevo diseño poco institucional y rechazan que el tradicional escudo haya sido relegado a usos concretos. 

Tal y como ha informado Reason.Why, la actualización de la imagen se ha realizado por vía de contrato menor -aquellos con importes menores a 15.000 euros y relacionados con servicios y suministros- y ha tenido un coste de 12.000,78 euros. El adjudicatario, en este caso, ha sido el estudio de diseño gráfico Interletraje, que recibió el encargo en febrero de este año. 

La nueva identidad ha tomado como epicentro la fachada del hemiciclo de la calle Bailén, en Madrid, puesto que según aseguran se trata de “uno de sus elementos visuales más reconocibles y que plasma su naturaleza parlamentaria”. No obstante, el órgano indicaba que se mantiene el escudo y la imagen de la fachada del Palacio para determinados usos.

Desde el Senado lo confirman a este medio señalando que “se ha añadido al escudo ya existente otra nueva imagen, que reproduce el hemiciclo, de tal forma que ambos logotipos va a poder usarse simultáneamente”. Apuntan también que llevan trabajando en la actualización de la imagen institucional desde finales del año 2022.

Pero el desplazamiento del tradicional símbolo ha sido duramente criticado por algunos usuarios, que en los últimos días han expresado su descontento en redes sociales. Esto habría llevado al Senado a dar marcha atrás en la implantación del nuevo diseño, especialmente en los activos digitales, como los perfiles en redes sociales -a día 24 de noviembre en Twitter seguía presente el escudo-; el canal de YouTube o el canal de difusión en Telegram -en las que sí llegó a producirse el cambio-.

Todo ello pese a que la nueva imagen estaba llamada a ocupar esos espacios. “La imagen de perfil de las redes sociales, así como la de la cabecera de la página web y la de la intranet del Senado utilizarán el logotipo en cualquiera de sus formas o versiones”, especifica el manual de imagen institucional.

Sin embargo, la nueva imagen no ha sido retirada, al menos no en su totalidad y no mediante comunicación oficial, como sí han informado otros medios de comunicación. Las publicaciones realizadas en redes sociales dando a conocer la actualización siguen siendo visibles, como también lo son el comunicado en el apartado de noticias de la página web o el manual de imagen institucional, que sigue pudiéndose consultar. 

No obstante, cabe señalar que el pasado 22 de noviembre el Senado comunicó la agenda del día a través de Twitter utilizando la nueva imagen, y hoy 27 de noviembre, para el mismo propósito, ha empleado el escudo tradicional. 

¿Una retirada?

Desde Reason.Why hemos hablado con el estudio Interletraje y nos aseguran que no les consta que se haya producido ninguna retirada de la nueva imagen. Recuerdan, además, que la nueva marca no sustituye la anterior y que tanto el logotipo del escudo como el logotipo de la fachada sur del Palacio se han buscado mantener desde el planteamiento de la renovación. 

Es más, tal y como se detalla en el manual, “el logotipo-escudo fue aprobado y registrado en el año 2009 y su permanencia asegura la vigencia del escudo del Senado como un elemento esencial en la identificación visual en determinados ámbitos”. Asimismo, se indica que “en determinados usos se considera de utilidad contar con un logo de la fachada sur del Palacio”. 

A este respecto, se indica que “de forma general, se utilizará el logotipo del Senado, los colores institucionales y la tipografía Lexend para todos los usos y aplicaciones, a excepción de los documentos de uso corriente en la actividad de la Cámara (papelería, documentos de trabajo y otros usos previstos en este apartado)". El documento señala que en ese caso, “se utilizará el logotipo-escudo con la tipografía Castellar MT y la Arial para el cuerpo de los textos” y que "se prevé la utilización excepcional del logotipo-fachada sur del Palacio para determinados usos que requieren combinaciones estilísticas concretas”. 

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En conversaciones con Reason.Why, desde el estudio de diseño consideran que el cambio de imagen “ha sido politizado” y utilizado como “arma arrojadiza” y, atendiendo al actual clima de crispación, señalan que cualquier propuesta “hubiera sido igualmente criticada”. Interletraje pone en valor sus credenciales y aluden al trabajo y desempeño en anteriores proyectos. 

En esta línea, defienden el diseño realizado para el Senado aunque apuntan que se ha visto influenciado por numerosas tomas de decisiones a múltiples niveles realizadas por personas ajenas al mundo del marketing, el diseño y la publicidad. También reiteran su tarea de asesoramiento respecto al mantenimiento de los símbolos tradicionales. 

Por último, valoran las críticas que, por parte de una sección de los usuarios, ha recibido el importe del proyecto (9.918 euros sin IVA). Aseguran que son precios sumamente inferiores a los que corresponderían a un trabajo de este tipo, y consideran que no puede “parecer caro”, especialmente si se tiene en consideración que se ha estado trabajando desde febrero.