En Suecia es común que las viviendas carezcan de persianas, un detalle que llama la atención de visitantes procedentes de países donde su uso sí es habitual. Esta particularidad se explica por una mezcla de factores climáticos, culturales y estéticos propios del estilo de vida sueco.
Debido a los largos y oscuros inviernos nórdicos, donde las horas de luz solar son escasas, las casas suecas están diseñadas para aprovechar al máximo la luz natural disponible. Las ventanas sin persianas permiten que la luminosidad penetre sin obstáculos, creando ambientes interiores más claros y acogedores. Además, el diseño escandinavo, conocido por su minimalismo y funcionalidad, prefiere el uso de cortinas ligeras o estores que brindan privacidad sin bloquear completamente la luz. Al no enfrentarse a altas temperaturas que requieran protegerse del calor, como ocurre en países más cálidos, las persianas no son una necesidad práctica en Suecia.
La ausencia de persianas en Suecia puede influir en la calidad del sueño de sus habitantes
No obstante, la ausencia de persianas en Suecia puede influir en la calidad del sueño de sus habitantes, especialmente durante los meses de verano, cuando las horas de luz solar se prolongan significativamente. En regiones del norte de Suecia, el fenómeno del sol de medianoche hace que éste permanezca visible las 24 horas del día, dificultando la creación de un ambiente oscuro necesario para un sueño reparador. La exposición a la luz durante las horas nocturnas puede alterar el ritmo circadiano, provocando trastornos del sueño y sensación de fatiga. Aunque muchos suecos utilizan cortinas opacas o antifaces para dormir, la falta de persianas puede representar un desafío adicional para mantener una higiene del sueño óptima.
En este contexto, desde Ikea se han propuesto ayudar a los suecos a dormir mejor y lo han hecho a través de una campaña de publicidad que convierte las ventanas de los hogares en soportes publicitarios. Así, de la mano de la agencia creativa Åkestam Holst NoA, Ikea Suecia ha lanzado el concepto de sleepfluencers; o lo que es lo mismo, ha instalado una persiana de forma gratuita en varios hogares a cambio de que estos conviertan sus ventanas en vallas publicitarias para Ikea.
Además de cumplir su función de bloquear la luz, el exterior de cada persiana muestra un producto de la gama de descanso de Ikea junto a su precio: almohadas, edredones y colchones aparecen así como anuncios en las ventanas de los hogares suecos.
"Es una manera de agradecer a nuestros clientes y, al mismo tiempo, ganar visibilidad de una forma nueva e innovadora", ha declarado Jonas Westberg, Director de Marketing en Ikea Suecia. "La campaña es una manera divertida y poco convencional de ayudar a las personas a dormir bien mientras promocionamos nuestra gama asequible a un mayor número de personas".
Tal y como explican desde la agencia, las persianas se han enviado a hogares de todo el país, transformando ventanas en anuncios mientras ayudan a más personas a dormir mejor. "Como en todas nuestras campañas, queríamos destacar la esencia del diseño democrático de Ikea", ha dicho Michal Sitkiewicz, creativo en Åkestam Holst NoA. “Esta campaña es un ejemplo lúdico de cómo podemos convertir un producto cotidiano en algo funcional e innovador”.
Ficha técnica:
Ikea:
- Jonas Westberg, Líder de Comunicación de Marketing, IKEA Suecia
- Sanna Green, Líder de Medios Integrados, IKEA Suecia
- Felicia Asklund, Gerente de Comunicaciones de Marketing, IKEA Suecia
Åkestam Holst NoA:
- Michal Sitkiewicz, Director de Arte
- Eva Wallmark, Directora de Arte
- Rickard Beskow, Redactor Publicitario
- Sophia Wattjersson, Directora de Clientes
- Anna Nollendorfs, Gerente de Cuenta
- Daniel Vaccino, Director Creativo
- Anna Forsberg, Final Art
- John Müllendorfs, Producción
- Sindra Liebe, Planificadora
- Jerker Winther, Jefe de Planificación
- Hugo Wallmo, Diseñador Creativo
- Carlos Carrasco, Director de Fotografía/Editor/Colorista
- Joanna Nilsson, Productora de Cine
Hogares convertidos en escaparates
Esta campaña recuerda a la que se lanzó hace un par de años en varios hogares del centro de Toronto que se convirtieron a la vez en escaparates y soportes publicitarios de Ikea. El objetivo era dar a conocer la apertura del primer establecimiento de la marca en el centro de la ciudad canadiense y la idea fue de la agencia Rethink.