Cualquiera puede sostener el timón de un barco cuando el mar está en calma, pero no todos pueden llevar la embarcación a buen puerto cuando se desata la tormenta. Esa es una de las lecciones de liderazgo que nos está enseñando no solo el paso de la pandemia por nuestro país, sino también el proceso de transformación digital en el que el tejido empresarial español está inmerso desde hace unos años.

El desarrollo tecnológico originado a raíz de la consolidación de internet, y acelerado en los últimos meses como consecuencia del coronavirus, ha dibujado un escenario de profundos desafíos que exigen un nuevo modelo de liderazgo. Para Albert Rivera, este es un atributo que se puede y debe trabajar, es decir, hay líderes que nacen y otros que se hacen. “En una sociedad cambiante como esta, los líderes tienen que estar permanentemente transformándose, renovándose. Necesitamos gente adaptativa, que vea venir las tendencias”, ha señalado en el marco del seminario online promovido por él mismo en colaboración con Thinking Heads.

En el panel empresarial del encuentro “Líderes en el cambio”, ex Presidente de Ciudadanos ha estado acompañado por Dimas Gimeno, empresario referente del sector retail y expresidente de El Cortes Inglés; Roberto Ramos, CEO y fundador de BeOne; Clemente Cebrián, CEO de El Ganso; y Beatriz Magro, Co-Fundadora de Komvida Organic Kombucha. Todos ellos han compartido sus conocimientos y experiencias en torno al proceso de emprendimiento y han reflexionado acerca de los desafíos que plantea el contexto para el crecimiento de las organizaciones.

A pesar de la complejidad del momento, coinciden en las oportunidades favorables que ofrece la digitalización para poner en marcha nuevos proyectos empresariales o potenciar el crecimiento de los ya existentes a través de vías que facilitan el contacto con nuevos targets y nuevos mercados. La diversidad de sus trayectorias, y las de sus respectivos negocios, han dejado cuatro valiosas lecciones en torno al liderazgo empresarial:

El valor de conocer el negocio desde la base

Aunque Dimas Gimeno ejerció como presidente de El Corte Inglés entre 2014 y 2018, su trayectoria dentro de la compañía comenzó ocupando puestos tras los mostradores de cara al público, para luego ampliar su experiencia en otros departamentos y distintos niveles organizativos. Un proceso formativo que le ayudó a entender la esencia y el corazón de la compañía y que le permitió desarrollar un liderazgo basado en el conocimiento del negocio.

Todo ello le sirvió para entender qué elementos hacían diferente a la cadena de grandes almacenes respecto a otros players del sector, un insight que considera fundamental para poder competir actualmente con los gigantes del comercio electrónico. “Es necesario entender con quién compites y hacerlo de la manera adecuada. Es verdad que hay desproporción en materia de impuestos y obligaciones financieras y que se necesitan condiciones de igualdad”, ha señalado Gimeno. Sin embargo, sostiene que la respuesta no es “esperar a que los políticos solucionen el problema, ni imponer medidas a las demás empresas”, sino atravesar las aguas de este periodo de shock, de este punto y aparte, “sin excusas, con el cuchillo entre los dientes y apoyándonos en lo que nos hace diferentes”.

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Aprender de los errores

Por su parte, Clemente Cebrián ha animado a los emprendedores a poner en marcha sus negocios a pesar de las complejas circunstancias que atraviesa el país y las perspectivas de un futuro incierto. “Las grandes empresas han surgido en los momentos más difíciles. Ahora hay enormes oportunidades para hacer las cosas de una forma diferente a cómo se venían haciendo hasta ahora, para repensar las fórmulas y sacar a relucir la creatividad y el esfuerzo”.

Para el CEO de El Ganso el buen liderazgo tienen un componente muy importante de error, de volver a intentar las cosas si salen mal, tal y como sucedió con la firma que él mismo dirige. En su caso, el crecimiento destacado del negocio captó la atención de un fondo de inversión internacional cuya intervención llegó a poner en riesgo la supervivencia de la empresa. “Las cosas no fueron bien porque no estábamos preparados para las exigencias de una estructura de ese tamaño. Tuvimos dos o tres años muy malos que podían haber hecho que El Ganso desapareciera”.

No obstante, fueron la confianza en el proyecto y la resiliencia lo que les hizo seguir adelante. “Decidimos apostar por la compañía, por el equipo, por la gente. Aprendimos que emprender no trata solo del éxito, sino también de los malos momentos”, ha señalado Cebrián.

Liderar más allá de la empresa

Cuando se habla de innovación y emprendimiento, habitualmente el pensamiento recurre a esa imagen de informáticos programando con ordenadores en un garaje de Estados Unidos, “pero también pueden ser dos mujeres en un pequeño pueblo de Extremadura trabajado con productos saludables”, ha explicado Beatriz Magro, Co-Fundadora de Komvida Organic Kombucha durante el encuentro.

Más allá de centrarse en la producción de esta bebida basada en la fermentación natural de té verde y azúcar, esta empresa tiene como objetivo contribuir de manera positiva a la vida de las personas. “Los empleados son nuestra primera fuerza. En la España vaciada hay una enorme tasa de desempleo femenino, por eso entre nuestros valores como marca está el fomentar el trabajo para los habitantes de nuestro pequeño pueblo”.

Con la llegada de la pandemia, este compromiso se llevó a cabo mediante el impulso del canal online. Los planes de crecimiento de la compañía hacia el sector HORECA y a nivel internacional se vieron retrasados debido al coronavirus, pero el entorno digital, sumado a la flexibilidad y la agilidad de la organización, les permitió seguir operando y manteniendo la actividad durante la emergencia sanitaria.

Apostar por la innovación en modelos de negocio

Al igual que cines y teatros, los gimnasios han sido uno de los establecimientos más perjudicados por las medidas preventivas contra el coronavirus. Sin embargo, muchos de ellos han encontrado en esta crisis una oportunidad para dar el paso definitivo en sus planes de digitalización. Tal y como ha explicado Roberto Ramos, el sector ha definido nuevos modelos de negocio basados en la convivencia del entorno offline, con las tradicionales clases presenciales, y el entorno online, con plataformas digitales y sesiones virtuales.

“Dirigir una empresa consiste muchas veces en buscar permanentemente la salida de nuestra zona de confort, de tener valor y trabajar duro para obtener soluciones eficaces”, ha comentado CEO y fundador de BeOne. No obstante, la eclosión del hábito de realizar actividad física, la concienciación de la población en relación a su importancia para la salud y las posibilidades que brindan las herramientas tecnológicas han sido claves para el éxito del proceso de adaptación de esta industria.

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Gestionar la resistencia al cambio

En un momento de constante transformación como el que actualmente vive el ecosistema empresarial, una de las barreras naturales que se pueden encontrar los negocios es la resistencia al cambio por parte del equipo. Para Dimas Gimeno vencer este obstáculo empieza por los propios líderes de las organizaciones. “Deben enarbolar la bandera del cambio y transmitirlo de arriba a abajo en la estructura de la empresa”.

Sin embargo, también es consciente de que hace falta formación y capacitación, “para aquellas personas que quieren cambiar, pero que no cuentan con las herramientas adecuadas”. Del mismo modo, también es necesaria la motivación, “para aquellos que no son conscientes de la importancia de su papel en la compañía”, así como identificar a quienes no quieren formar parte de la transformación, “para que no impidan el cambio”. A este respecto, Gimeno ha resaltado la importancia de la comunicación. “Hay que dejarse de relatos e historias que están de moda. La verdad y lo realmente importante deben ir por delante para que las personas se sientan parte del proyecto”.

A modo de conclusión, Albert Rivera ha puesto en valor la nueva economía de emprendedores que buscan la conexión y la colaboración como palanca para impulsar el crecimiento del tejido empresarial. “Quienes realmente levantan el país son estas personas que se juegan su capital, que tienen ideas, que contratan gente, que pagan sus impuestos y que si se caen se vuelven a levantar”.