Marc Murtra ha protagonizado su primera presentación de resultados financieros desde que fuera designado nuevo Presidente Ejecutivo de Telefónica a finales del pasado mes de enero. Y en ella, además de agradecer la confianza del Consejo y reconocer la labor realizada por Jose María Álvarez-Pallete, ha prometido una revisión estratégica de la compañía. 

Murtra ha señalado, ante la etapa que ha comenzado, que supone un privilegio liderar la nueva era de Telefónica, que considera un agente estratégico de la economía, no sólo española sino también europea, y que ha sabido adelantarse y ser motor de transformación. Asegura que su ambición es hacerla aún más relevante fortaleciendo su posición en el mercado de las infraestructuras digitales. 

Esto implica, tal y como ha señalado, adaptarse a los movimientos que Telefónica está observando en el entorno. “En los últimos meses hemos visto cambios en el entorno geoestratégico y disrupciones tecnológicas que obligan a acelerar nuestra estrategia en un sector que es necesario para la soberanía tecnológica en Europa”, ha señalado Murtra en su primera intervención. “Ante la fragmentación de las telecomunicaciones, Europa debe permitir la consolidación para garantizar un sector sano y competitivo”. 

Para ello ha prometido, y reiterado en numerosas ocasiones, la realización de una “reflexión estratégica”, cuyas conclusiones se compartirán al comienzo del segundo semestre de este año. “Soplan vientos de cambio en Europa e iniciamos una reflexión estratégica. No vamos a ser observadores, seremos parte del cambio que vemos venir”, ha apuntado Marc Murtra en su primera rueda de prensa como Presidente de Telefónica. 

A lo largo de la sesión ha dado algunos detalles más de en qué va a consistir dicha reflexión estratégica. Ha apuntado, entre otras cosas, que las prioridades de Telefónica será una revisión basada en la lógica de la industria, el mantenimiento del foco en los negocios claves y core, el impulso de la consolidación en Europa para reforzar la autonomía estratégica europea, y la creación de valor para accionistas y grupos de interés. 

“Vamos a hacer una revisión estratégica de todos los negocios para ver como adaptarnos a la nueva situación. Siempre haremos lo que diga el Consejo”; ha repetido en numerosas ocasiones. No obstante, Murtra parece inclinado a continuar con el proyecto de la compañía. “Hay continuidad, coherencia y respeto hacia lo que se ha hecho, que es muy buen trabajo, y continuará habiéndola”, ha dicho. “Pero estamos en un entorno nuevo y diferente y queremos adaptarnos”. 

Telefónica quiere consolidación en Europa

Con ello, Murtra ha aludido a los movimientos políticos y comerciales de grandes potencias como Estados Unidos y China y las recientes afirmaciones de lideres políticos europeos sobre la necesidad de una Unión Europea unida, reforzada e independiente. “Una parte importante de la autonomía estratégica pasa por las telecomunicaciones. A través del móvil pasan todas nuestras comunicaciones, preferencias, adquisiciones, información bancaria o vida romántica”; ha comentado Marc Murtra. “Nuestra visión y análisis nos llevan a decir que va a haber cambios drásticos en Europa. Vamos a analizar a qué velocidad y cuando y como ocurren”.

En este sentido, ha hecho referencia a la necesidad de consolidar la industria de las telecomunicaciones y reducir la fragmentación. “Europa tiene 41 operadores con más de medio millón de clientes, en Estados Unidos hay 5, y China es un mercado mucho menos fragmentado”, ha señalado. “No queremos ser un actor pasivo. Tenemos un conocimiento, un rol y una historia que nos permiten ayudar y vemos una oportunidad clara para liderar”. 

El Presidente de Telefónica no ha comentado sobre qué cantidad de operadores de telecomunicaciones sería el adecuado para Europa, pero ha señalado que a lo largo de los últimos años los grandes cambios tecnológicos y empresariales han estado liderados por compañías “que tienen una escala relevante mas allá de un estado miembro de la Unión Europea, cuenta con márgenes sanos y con capacidad de invertir a largo plazo”. 

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De todo ello se infiere que la ambición de Murtra es situar a Telefónica a la cabeza de esa consolidación y posicionarse como agente líder en Europa. No obstante, ha señalado que aún hace queda un gran recorrido y hace falta trabajar para llegar a ese escenario de consolidación. No ha desvelado si la compañía se encuentra en conversaciones para realizar algún tipo de operación. 

Respecto a la reflexión estratégica, Murtra ha comentado, entre otras cosas, que no prevee que implique la incursión de Telefónica en nuevas industrias, como defensa o aeroespacial. Del mismo modo que, de momento, no estima cambios en el equipo directivo de la compañía. “Vamos a adaptar la estrategia a los cambios que vemos que están ocurriendo y en función de lo que creemos que debe ocurrir para cumplir los objetivos y para lo que es bueno para el sector”, ha incidido. “Analizaremos bien los mercados para tener estrategia solida y ambiciosa y asumiremos riesgos donde sea necesarios”. 

La visión de Murtra sobre la inteligencia artificial

También ha dedicado unos instantes a compartir su visión sobre el momento tecnológico actual. A este respecto ha señalado que para poder actuar eficientemente y con buenos resultados se de saber identificar bien qué tecnología tiene sustancia y cual es sólo “hype”. Así, ha expresado que la inteligencia artificial y la inteligencia artificial generativa son extraordinariamente disruptivas y con un gran potencial para cambiar muchas cosas. 

“A la vez, crear tecnologia es extraordinariamente difícil y no es barato. Las organizaciones deben estar muy concentradas respecto al ritmo al que avanza realmente la tecnología”, ha comentado. Y respecto a la IA ha adelantado que la compañía también tiene que reflexionar acerca de cómo activar la inteligencia artificial en sus mercados core, y cómo “aplicar agresivamente, pero de manera rigurosa” dicha herramienta en sus propias operaciones para mejorar su actividad y la experiencia de los clientes. 

En lo que respecta a los resultados financieros, los directivos de Telefónica valoran un desempeño sólido y destacan el cumplimiento de objetivos. En el último trimestre de 2024 la compañía obtuvo, excluyendo los impactos extraordinarios, como los costes de reestructuración o los deterioros contables, un beneficio neto ajustado de 425 millones de euros en el cuarto trimestre y de 2.304 millones de euros.
No obstante, dichos impactos han dado lugar a unas pérdidas netas de 1.003 millones de euros en el cuarto trimestre, que en el conjunto del ejercicio se han situado en los 49 millones de euros.

Además, los ingresos crecieron un 1,6%, hasta 41.315 millones de euros, y por encima de la meta de que subieran en torno al 1%; mientras que el EBITDA ha aumentado un 1,2%, hasta los 13.276 millones de euros, dentro de la horquilla situada entre el 1% y el 2%. También ha apuntado que en 2024 incrementó su base de clientes y ha cerró el año con un total de 390 millones