“Hay un poco de Catedral en tu valla”.
Es uno de los copys de la acción que un grupo de alumnos de la Escuela Brother llevaban a cabo hace unos días en Barcelona con motivo de la polémica lona de Samsung que llevaba meses colocada en la Catedral y que ha contribuido a ejercer presión social para su retirada.
Samsung paga una tasa para el uso publicitario que, posteriormente, el consistorio destina a obras de mejora del paisaje y recuperación de la ciudad
En junio de 2022 el Ayuntamiento de la Ciudad Condal daba luz verde para cubrir el edificio en obras con un anuncio de Samsung, puesto que la empresa anunciante paga una tasa para el uso publicitario que, posteriormente, el consistorio destina a obras de mejora del paisaje y recuperación de la ciudad.
En el caso de la Sagrada Familia, por ejemplo, la tecnológica y la Fundación del templo barcelonés firmaron un acuerdo de colaboración en febrero del año pasado por el que Samsung produciría un vídeo sobre las vidrieras y ha instalado televisores en la basílica.
Pero con el caso de la Catedral de Barcelona, tras la colocación de la lona algunos usuarios han venido considerando que es una “falta de respeto” que un edificio religioso, que forma parte del patrimonio histórico y que está considerado como Bien Cultural de Interés Nacional, cuente con un anuncio en su fachada.
Dada la polémica suscitada durante los últimos meses, y pese a que el Arzobispado de Barcelona -propietario de la Catedral- le quitaba hierro al asunto afirmando que “la iglesia no solo trabaja para los pobres, también debe cuidar su patrimonio”, tuvieron que acometerse algunos cambios en la instalación. Y es que su excesiva iluminación nocturna superaba los límites que marca la normativa municipal sobre contaminación lumínica, por lo que el Ayuntamiento de Barcelona se puso en contacto con el operador publicitario para que redireccionara los focos y disminuyera la intensidad de los mismos, con el fin de cumplir con el convenio de autorización de lonas publicitarias de la capital catalana.
Una acción de la Escuela Brother se suma a la presión social
En este contexto, hace unas semanas la tripla de la escuela Brother Barcelona, integrada por Lali Solari, Emi Nogueroles y Flavio Hugo Vilan, intervino a través de una idea creativa titulada “Adeu Ad”, consistente en una pegada de carteles por las paredes de edificios de la zona, en los accesos del parking y en el suelo frente a la Catedral. Los pósters contenían un código QR que reproducía una imagen cuadrada de la parte del templo cubierta por la lona y no visible para los visitantes, para resolver la vista completa y real del templo.
Con copys como “El que no conoce a Dios a cualquier smartphone le reza”, “Hay un poco de catedral en tu valla publicitaria” o “Mucho smartphone para una valla tan poco smart”, los alumnos conseguían llamar la atención de muchos visitantes, logrando que la idea se viralice en redes sociales.
Influencers nacionales como Itziar Oltra o la comediante argentina Malena Pichot, se hacían eco de esta intervención, dando así voz a un reclamo ciudadano que se venía escuchando desde hace más de un año en la ciudad.
“Amamos la creatividad y el mundo de la publi, pero no cuando excede los límites o se da un mensaje confuso, por eso hicimos buena publicidad para acabar con la mala. No podemos estar más contentos con el resultado”, explican desde el equipo de jóvenes creativos.
Según fuentes cercanas a la planificación de la acción publicitaria, la previsión era "mantener la lona hasta diciembre de 2023" y así lo reflejan varios medios; sin embargo, desde Samsung son varios profesionales los que aseguran que esa información no es correcta y la presencia publicitaria estaba prevista hasta"cualquier momento del segundo trimestre del año".
Sea como fuere, a día de hoy la polémica lona ha sido retirada por decisión de la marca y ahora algunos ciudadanos se preguntan si la retirada de Samsung dará paso a un nuevo anunciante.