El sexo, un recurso que parecía un seguro en la publicidad, podría tener los días contados como tal. Y es que, según un estudio publicado en la revista científica Psychological Bulletin, los temas neutros son más eficaces para el recuerdo y la notoriedad de marca.
Según el Profesor de Comunicación y Psicología de la Universidad Estatal de Ohio, Brad Bushman, la programación de televisión en la que predomina la violencia y el sexo afecta a la memoria de los espectadores. En definitiva, provoca que éstos desvíen su atención de la publicidad que aparece ante ellos con este tipo de contenido.
Analizando los resultados de 53 experimentos, Bushman ha determinado que no hay diferencia entre los efectos que produce la publicidad con carga violenta o sexual y el resto. Es más, “en todo caso perjudica” .
El sexo se olvida antes
Y la memoria es la principal causa de que esto sea así. Según el co-autor del estudio, “las marcas que se anuncian en contextos violentos se recuerdan con menor frecuencia, se evalúan de manera menos favorable y son menos elegidas a la hora de realizar la compra”.
Sin embargo, según refleja el estudio, la publicidad en medios sexuales no es tan perjudicial como la que aparece en medios violentos. Aunque, como ha recalcado Bushman, eso no significa que sea una estrategia más exitosa.
Evitando temas polémicos
Pese a que el estudio ha sido publicado este 2015, algunos anunciantes ya eran conscientes de las premisas que revela, según ha indicado Robert L. Lull, investigador de la Universidad de Annenberg Public Policy Center y co-autor del estudio. De hecho, la campaña presidencial de Obama en 2008 llegó a anunciarse en sites de videojuegos pero evitó aquellos que tenían carácter violento o sexual.
Por su parte, Wal-Mart Stores Inc. ha afirmado que su publicidad es un 18% más efectiva cuando es colocada es espacios familiares que en otros más “polémicos”.
¿Se trata del final de la primacía del sexo en la publicidad? Tendremos que esperar para verlo...