La transparencia tenía que llegar a las agencias de publicidad

agencia-manifiesto

En los tiempos que corren, la transparencia se presenta en el mercado como un motor de confianza.

La profesión publicitaria se ha desvirtuado a sí misma durante muchos años enganchándose - por desgracia- al desconocimiento del cliente y la opacidad de la industria. Hemos sido testigos de presupuestos engrosados, show business ineficaz, publicidad de letra pequeña… y un largo etcétera.
Sin embargo, la experiencia nos ha demostrado que los consumidores se posicionan a favor de las empresas que transmiten una filosofía transparente. No podía ser de otra forma…

En este contexto, el sector publicitario debe renovar sus valores y su actitud hacia los clientes para disfrutar de una época que debería ser muy gratificante para la profesión.

Los anunciantes quieren entender cómo se crea una campaña

Los anunciantes huyen del ostracismo y piden entender el proceso de creación de una campaña. Cómo se desarrolla una idea creativa; cómo se tangibiliza un diseño o cómo se organizan los flujos de trabajo para cumplir con los timings. En definitiva, que el único misterio sea la idea. Una idea que les sorprenda, sí; pero que funcione y sea realizable.

Los anunciantes también quieren honestidad. Nadie compra humo; nadie debería venderlo.
Por eso las marcas buscan en la agencia un partner de confianza que sea transparente en cuestiones de procesos y de presupuestos.

En una relación así, no sería extraño que la honestidad y la valentía nos llevaran, por ejemplo, a reconocer dilataciones en el fee. Si ha habido transparencia en toda la operativa, el cliente se mostrará confiado y sabrá que vamos a buscar una solución juntos (tanto al alza como a la baja). Habrá ocasiones en las que dediquemos menos horas de las planteadas o al revés, que nos quedemos cortos en la estimación.

Al fin y al cabo, la transparencia es un beneficio de doble vía.

No es época para relaciones imposibles

Si el cliente conoce el trabajo de la agencia y entiende los tiempos, nos habremos ganado su confianza y podremos conquistar mejores resultados en el entorno de una relación duradera.

 

El valor de decir que no

La transparencia publicitaria no solo se refiere a cuestiones económicas y de procesos, también hablamos de filosofía.
No es época para relaciones imposibles. Las agencias no podemos estructurar una cartera de clientes en torno al dinero. Una retirada a tiempo puede suponer la motivación de todo un equipo.

Decir que no también nos podrá acercar a una campaña de éxito.
Los clientes ofrecen ideas -porque nadie mejor que ellos conoce su propuesta de valor o su producto- pero nos contratan para depositar su confianza en nosotros.
Gracias a la transparencia podremos evitar planteamientos imposibles. Los anunciantes de hoy buscan talento publicitario capaz de encontrar ideas brillantes y se alejan de un equipo que se limite a decir que sí a todo.

Equipo transparente

La transparencia requiere de una actitud interna en el equipo

La transparencia como valor corporativo implica también una actitud interna entre los miembros del equipo para que fluya y no haya fisuras hacia ninguna dirección.

Que se conozcan los presupuestos, los márgenes, el status de las cuentas… que el feedback se convierta en una necesidad cómoda de solicitar y también de ofrecer.

Aplicando esta práctica conseguiremos generar confianza en todos los niveles de trabajo.

Actitud transparente

Cuando la transparencia se convierta en actitud la presencia del cliente en la agencia será una motivación.
Podrá conocer de primera mano cómo trabajan los equipos o incluso sentarse con ellos y plantear cualquier duda.

Porque el objetivo de la transparencia es permitir que la agencia sea una extensión del anunciante. Sin duda, el mercado nos va a llevar por ahí.

 

agencia-manifiesto

Manifiesto es una agencia de publicidad independiente que trabaja con una actitud #cercana, #transparente, #responsable y, sobre todo, #creativa. Con sede en Barcelona, Madrid y México, Manifiesto cuenta con más de 70 profesionales encargados de gestionar campañas nacionales e internacionales. Su perspectiva estratégica permite orientar cada proyecto de la manera más rentable y exitosa posible. Un equipo dispuesto a generar ideas para todo tipo de clientes, transmitiendo los valores y actitud de la agencia.