Nancy Andreasen es neurocientífica y lleva años investigando y estudiando el origen y las causas de la creatividad.
De uno de sus últimos estudios se desprende que los desórdenes mentales y la creatividad van muy de la mano.

La conexión viene de los tiempos de Aristóteles, cuando las eminencias en filosofía, política, poesía y arte tenían una tendencia común hacia la melancolía. Es el estereotipo del genio al que estamos acostumbrados.
Entre los genios que perdieron la batalla contra sus enfermedades mentales se encuentran Virginia Woolf, Ernest Hemingway, Vincent van Gogh o Mark Rothko.

Nancy Andreasen lleva años trabajando con pacientes que sufren esquizofrenia y trastornos del comportamiento. Y es que hay un órgano en el cuerpo humano que le llama mucho la atención por lo interesante y, a la vez, complejo que es: el cerebro.

En los últimos años Nancy se ha centrado en el estudio lo que se conoce como la ciencia del genio. Ella trata de averiguar la combinación de elementos que da lugar a la generación de un cerebro creativo.

Las dos preguntas que más se ha repetido en sus investigaciones son:

• ¿Qué hay en la naturaleza para explicar por qué unas personas nacen con desórdenes mentales y otras no?
• ¿Por qué las mentes más creativas del mundo son las más afectadas por esos desórdenes?

En su último estudio Nancy ha escaneado el cerebro de algunos de los científicos, matemáticos, artistas y escritores más brillantes de la era actual. Mediante este análisis ha sido capaz de responder mejor que nunca a la segunda pregunta.

En el estudio Nancy creó una entrevista estándar para sus sujetos incluyendo temas sociales, familiares, de desarrollo y hábitos de trabajo.
Después, a partir de los estudios sobre creatividad realizados por el psiquiatra Thomas McNeial, evaluó la creatividad de los sujetos concediendo un A++ a aquellos que tenían una carrera creativa de éxito y un A+ a los que tenían hobbies e intereses relacionados con la creatividad.

El reto final del estudio consistió en seleccionar un grupo de control. Para ello Nancy entrevistó a gente con diferentes profesiones como trabajadores sociales y administradores. Después unió al grupo de control con el grupo de escritores, por edad y nivel de estudios. Todos los sujetos analizados dieron un cociente intelectual de alrededor de 120. Este resultado confirmó que el genio creativo no está relacionado con un CI alto.

¿Entonces, qué hace creativos a los genios?
Del grupo de escritores analizados por Nancy, el 80% había tenido algún tipo de desorden mental frente al 30% de los que lo habían tenido en el grupo de control.

Desde entonces Nancy lleva años tratando de diseñar un estudio modelo que permita identificar las características propias de un cerebro creativo.

El descanso es una de las situaciones que, tras años de investigaciones, se ha demostrado que activa los procesos cerebrales de asociación en las mentes creativas.
De esta forma se ha podido comprobar que las personas creativas son mejores a la hora de reconocer relaciones, hacer conexiones y ver las cosas de una forma original, detectando aquello que otros no son capaces de ver.

Muchos de los sujetos analizados por Nancy aseguraron que las ideas venían a su mente mientras estaban en la ducha, conduciendo o haciendo ejercicio.

Conclusiones
Nancy Andreasen ha sido capaz, tras décadas de investigación, de llegar a las siguientes conclusiones sobre la gente creativa:

• Muchos son autodidactas, les gusta aprender por sí mismos.
• Muchos son eruditos, como lo fueron Miguel Ángel o Leonardo da Vinci. 
• La gente creativa tiende a ser persistente incluso cuando se enfrentan al escepticismo o al rechazo.
• La gente creativa tiene una forma de ser exploradora y aventurera.
• La creatividad suele ser una herencia familiar.
• La gente creativa y sus familiares presentan tasas más altas de trastornos mentales.