Coca-Cola Filipinas ha decidido no gastar más dinero en publicidad. Al menos por ahora.
La medida entró en vigor el pasado 18 de noviembre y afecta a todos los medios y canales en los que la compañía tiene presencia.
El motivo es el tifón Haiyan, que el pasado 9 de noviembre arrasó varias islas en Filipinas.
Coca-Cola ha decidido invertir el dinero que se ahorre con esta medida en enviar ayudas a las principales zonas afectadas.
Coca-Cola Filipinas y su socio embotellador, Coca-Cola FEMSA Filipinas, ya han enviado 2,5 millones de dólares en ayuda. Parte de esa donación consiste en 129.000 cajas con botellas de agua, lo que representa una contribución por valor de casi 600.000 $.
El resto de la ayuda irá destinada a la rehabilitación de edificios, a comercios pequeños e independientes que han sido destruidos y a la Cruz Roja Americana.
Además, Coca-Cola Filipinas se unirá a los trabajos del Gobierno filipino y de las organizaciones humanitarias para la reconstrucción del país.
“Nuestro negocio está muy arraigado en estas comunidades. Es momento de brindar asistencia durante este tiempo de necesidad” afirma Guillermo Aponte, presidente y director general de Coca-Cola Filipinas.
No es la primera vez que Coca-Cola lleva a cabo un acción como ésta.
En enero de 2010 donó más de 2 millones de dólares para las víctimas del terremoto que devastó Haití.
