La nueva Ley de Emprendedores trae ventajas para Pymes y autónomos

El criterio de caja en el IVA es una de las novedades que trae la Ley de Emprendedores. Desde el pasado 1 de enero de 2014, las Pymes y autónomos pueden aplazar el pago del impuesto hasta que cobren la factura.

La reciente instaurada Ley de Emprendedores y su internacionalización ha traído muchas novedades fiscales para 2014. 

 

La principal novedad es la creación del “Criterio de Caja en el IVA”, instrumento de carácter voluntario que permite a Pymes y autónomos aplazar el pago del impuesto del valor añadido hasta que cobren la factura. 

 

 

Con esta medida se intenta dotar de liquidez a las pequeñas y medianas empresas con un volumen de negocio inferior a los 2 millones de euros anuales

 

El nuevo régimen ha entrado en vigor el pasado 1 de enero, pero la petición de ser incluido en el mismo podrá ejercitarse hasta el 31 de marzo de 2014

 

Esto supone también un incentivo para los clientes acogidos al régimen a adelantar el pago de las facturas, porque cuanto antes lo hagan antes se podrán deducir el IVA soportado

 

De este modo esta novedad también supone una medida adicional de lucha contra la morosidad

 

Toda ayuda es poca para los emprendedores. Porque como ya dijo Evan Henshaw-Plath, ingeniero que participó en el nacimiento de Twitter: “Emprender es como construir una casa sin plano”.

 

Es importante tener en cuenta que si no se ha cobrado la factura el día 31 de diciembre del año siguiente a su emisión, el IVA sí tendrá que pagarse ese día, a pesar de no haberse cobrado. 

 

Por motivos de lucha contra el fraude, se han establecido obligaciones de información mínimas para garantizar el control, que se limitan a añadir en los libros registro de los acogidos las fechas de cobro o pago y el medio utilizado. 

 

La nueva Ley de Emprendedores también prima la inversión con deducciones de hasta el 10% a los beneficios que se reinsertan y, además, rebaja impuestos a la innovación empresarial y a quienes financien nuevos proyectos. 

 

Eso sí, la reforma tributaria integral llegará en febrero con el IRPF como estrella.  

 

Con esta reforma se establece un nuevo incentivo fiscal a favor de los “business angels” (personas interesadas en aportar capital para el inicio de una actividad): una disminución del 20% en la cuota estatal en el IRPF con ocasión de la inversión realizada. 

 

"Afectará más a las rentas altas y animará a consumir” según los analistas, y "se conseguirá así más justicia fiscal y mayor recaudación”.