Mad Men toca a su fin y el corazón de Manhattan se ha propuesto explotar las posibilidades comerciales que brinda la aclamada serie a través de acciones especiales con las que recordar sus casi ocho años en antena.
Antes de la emisión de los últimos capítulos, prevista para el 5 de abril, Don Draper se ha dado un baño de multitudes frente a la sede de la agencia ficticia Sterling Cooper & Partners.
La silueta del publicista descansa desde este lunes en un banco cercano al Time&Life, el emblemático edificio neoyorquino en el que tiene lugar la trama de la serie y al que gran parte del reparto ha acudido estos días para rendir su particular homenaje a Mad Men.
La serie, que desembarcó en la pequeña pantalla en 2007, refleja las vivencias del sector en los años sesenta. Una estética que los restaurantes de la zona han adoptado durante estos días, en los que sirven “almuerzos Mad Men”.
Una oferta para hacer caja a costa de la serie y que invita a los usuarios a comer como el propio Don Draper por menos de 20 dólares.
Homenaje en el Museum of the Moving Image
Convertida en una serie de culto para los profesionales de la Publicidad, el furor de Mad Men ha llegado a los museos.
El Museum of the Moving Image de Nueva York ofrece desde este mes y hasta el próximo junio una exposición que explora el proceso creativo de esta producción y muestra distintos espacios del set, como la cocina de Draper. Un filón para los amantes de la serie que vivirán el cierre de Sterling Cooper & Partners en cuestión de días.