Madrid se ha convertido en un ejemplo de movilidad en Europa, pero también en un campo de pruebas. Coches, bicicletas, ridesharing, patinetes, transporte público… Todo tiene cabida en la capital de España.
Estamos en la Semana Europea de la Movilidad 2018, una cita en el calendario cuyo objetivo es sensibilizar tanto a políticos como ciudadanos sobre las consecuencias negativas que tiene el uso irracional del coche en la ciudad. Así se destacan los beneficios de los modos de transporte más sostenibles, como son el transporte público, la bicicleta, los viajes a pie… O los nuevos modelos de transporte que se basan en la movilidad compartida.
En este contexto WiBLE, la plataforma de carsharing de Kia, junto a HUB de Movilidad Conectada y Impact HUB Madrid, reunió ayer a los principales players del sector para hablar sobre el recorrido, el estado y el futuro de la movilidad compartida dentro de la ciudad.
Chipiapp: Un análisis de la Movilidad Inteligente
Emilio Mellado es el CEO y Fundador de Chipiapp, un agregador que te permite comparar y pedir en tiempo real muchas de las opciones de movilidad que actualmente existen en la ciudad: transporte público, Uber, Mytaxi, Cabify, Car2go, Emov, Ecooltra, Muving, Bicimad, Movo…
La integración de todas estas aplicaciones les permite tener una visión privilegiada sobre la realidad de la movilidad compartida en el centro de Madrid, unos datos que muestran de verdad de qué va todo esto.
El mejor ejemplo del recorrido del último año puede ser esta foto, que muestra las opciones de movilidad que existían en Madrid a principios de 2017 (dos: Car2go y Emov) en comparación con todas las que hay en la actualidad.
- Hay un 24% más de reservas de carsharing que de motosharing. Excepto picos puntuales que se producen ciertos días.
- VTC no es siempre más barato que el taxi: depende de las horas.
- Los picos de demanda coinciden con los momentos de mayor tráfico: 8:00, 14:00 y 19:00 aproximadamente.
- El volumen de automóviles que suman estas aplicaciones son unos 2.010. El número de reservas de cada coche depende mucho de la zona donde esté situado, por eso la colocación del coche es clave.
- ¿Y el número de motos? 1.898 en Madrid. Aunque la rotación de estas es inferior respecto a los coches, lo cual significa que están más tiempo paradas.
Tras esta imagen de la situación actual de la movilidad compartida dentro de Madrid, llegaba el momento de escuchar a los protagonistas: aquellos que están detrás de las empresas que han propiciado este cambio de escenario.
En la mesa redonda participaban:
- Javier Martínez Ríos, CEO de WiBLE Spain
- Raúl Viudez, Technology and Marketing Manager de WiBLE Spain
- Luis González, General Manager Madrid de Coup
- Mariano Silveyra, Regional Manager Europa de Cabify
- Ignacio Ramos Soriano, Innovación y Movilidad, Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT)
- Pablo Pérez, CEO de Local Terminal
¿Cómo ha cambiado Madrid en los últimos años?
La primera parte de la mesa redonda analizaba los motivos que han llevado a la ciudad de Madrid a convertirse en lo que es hoy: un campo de pruebas para la movilidad compartida.
Ignacio Ramos, de EMT, explicaba que esto no era imaginable hace cinco años. “Estábamos muy metidos en temas de movilidad, en permanente diálogo con la calle. Pero aún así éramos incapaces de prever esto”.
Y es que se han convertido en una alternativa al transporte privado, como explicaba Luis González, de Coup. “El que viene al centro en coche privado, vuelve en coche privado. Pero nuestro usuario puede ir en moto, y volver en bus de la EMT. Hablamos de la contraposición del transporte privado”.
El Ayuntamiento de Madrid apuesta por el usuario multimodal
Esta transformación de Madrid ha sido, en gran parte, gracias a la respuesta del Ayuntamiento ante estos nuevos modelos. No obstante, la EMT también es movilidad compartida. “Movemos a miles de personas cada día, somos un servicio complementario” explicaban.
De hecho, la administración pública también apuesta por un usuario multimodal: aquel que utiliza varios sistemas de transporte para moverse dentro de la ciudad a lo largo del día.
Y quieren ponérselo muy fácil. Por ese motivo ya están trabajando en su propio agregador de transportes. “La movilidad es un servicio. Y nos metemos en esto como administración pública porque ya somos operadores de algunos aparcamientos, bicicletas públicas, autobuses… Solo con lo que nosotros ofrecemos ya podemos emitir soluciones para el usuario”.
Pero también se mencionaba la parte más complicada para las administraciones públicas, que en ocasiones se ven presionadas por la opinión pública cuando se habla de saturación del mercado. Ignacio comentaba que son los propios vecinos los que a veces están descontentos con la situación. “Al final están pagando por su aparcamiento y están entrando muchos coches de estos servicios que se están llevando esas mismas plazas. No es sencillo. Mientras la ciudad lo soporte, seguiremos aceptando nuevas opciones con los brazos abiertos. Pero si un día la situación se desborda, entonces tenemos la potestad de poner orden”.
¿Quién es el usuario de los servicios de movilidad?
¿Existe un perfil de usuario que utiliza estos servicios de movilidad? ¿Son siempre jóvenes tecnológicos? Según Raúl de WiBLE, costaría encontrar un perfil bajo esos parámetros. “Los datos de early adopters sí son usuarios más jóvenes y digitales. Pero cuando el servicio va asentándose, no se dividen tanto por edad sino por ámbito geográfico. Por eso queremos llegar mucho más allá del centro de Madrid”.
Luis, de Coup, coincidía incluyendo el fenómeno del marketing orgánico: “Cuando la gente nos ve en la calle, nos empieza a conocer”.
Y es que a la hora de probar estos nuevos servicios, la información lo es todo. Por eso Mariano Silveyra, de Cabify, denunciaba la desinformación al respecto. “Hay mucha fobia en este tema porque se ha introducido el componente político. Hay una conversación rancia que no va a ningún lado y no aporta valor realmente. La discusión es que si somos muchos, y eso genera cierta resistencia por parte del público. ¿Estaré cometiendo un delito por subirme a un patinete?".
La percepción de la realidad también juega en contra de estas plataformas según Coup. “El porcentaje entre motos privadas y motosharing es mucho más bajo. Pero si la gente ve de pronto dos motos nuestras aparcadas juntas, la percepción es otra. Parece que estamos invadiendo la ciudad”.
Así se llegaba a la conclusión de crecimiento sostenido y opciones para todos. Porque, como decía Ignacio de la EMT, “quizás no todos los madrileños puedan siempre acceder a un sistema que sea de equis euros por minuto”. Como puntualizaba Mariano de Cabify, “no todo el mundo está dispuesto a esperar 20 minutos o andar 500 metros por un coche. Así que el crecimiento favorece a todos, nadie pierde. Pero eso parece difícil de entender”.
El futuro de Madrid y los servicios de movilidad
¿Cuál será la situación dentro de cinco años? ¿Cómo será la ciudad? Una de las conclusiones es que probablemente esto transforme físicamente las ciudades, con un impacto urbanístico positivo.
Pablo Pérez, de Local Terminal, comentaba que probablemente los dos modelos de sharing que existen en la actualidad converjan en uno. “Ahora mismo hay dos opciones: compartir coche o compartir coche y ride. Son dos modos de sharing que, aunque hablemos juntos de ellos, son cosas completamente diferentes”.
Y a rasgos generales estaríamos hablando de una ciudad más grande, con un compromiso de apertura y fomento de nuevas alternativas. Una nueva realidad que no solo será de unos cuantos, sino que la mayor parte de la población hará uso de este tipo de servicios. En definitiva, una ciudad más limpia y sostenible.
Veremos si se cumplen las predicciones...