El boom tecnológico de Silicon Valley es algo de lo que no todo el mundo se está beneficiando.
A medida que los alquileres se disparan, casi el 55% de los trabajadores de Silicon Valley no llega a los 90.000 dólares necesarios para mantener a una familia de cuatro personas en esta región.
De hecho, Silicon Valley está en la quinta posición de zonas con mayor población indigente en EEUU y en los últimos tres años el problema se ha acrecentado según el último Índice de Silicon Valley.
Las cifras positivas reflejan que en Silicon Valley se crearon 92.000 nuevos empleos y 46.000 nuevos negocios en el año 2012. Como consecuencia, el mercado inmobiliario se está disparando también en esta región con la reciente construcción de complejos de viviendas de lujo, como el NEMA.
Gracias a los servicios de autobuses que ofrecen las empresas hasta el campus de Silicon Valley, los empleados pueden vivir felizmente a las afueras de San Francisco.
Pero mientras que los crecientes precios son buenos para algunas personas, muchos están encontrando cada vez más difícil vivir en la zona. Por eso las protestas han llegado hasta esos autobuses, como el de Google.
Cada vez más personas viven en las calles de Silicon Valley convirtiendo a la indigencia en el lado oscuro de la burbuja tecnológica.
Y aunque San Francisco gasta 165 millones de dólares anuales en tratar de poner solución a este problema, la población indigente de la ciudad ha crecido en unas 6.000 personas en la última década.
Según algunas estimaciones, cerca de 1.000 niños y adultos jóvenes sobreviven en las calles sin un hogar. Y a esto hay que añadirle una escasez de viviendas para toda la población que necesita vivir en la región.
Cuando se abrió el plazo de solicitud para un edificio de 60 viviendas asequibles este 2014 aplicaron más de 2.800 personas. La demanda está saturada.
Además, las personas sin hogar lo tienen cada vez más complicado para sobrevivir en estas zonas. En Palo Alto por ejemplo se ha prohibido que la gente duerma dentro de los coches.
Con pocas opciones entre las manos, los indigentes están optando por desplazarse hacia la zona de San José llamada “The Jungle”. Aquí es donde viven las personas que no tienen otro sitio al que ir. Una zona en la que, según informa Business Insider, abundan la droga, la violencia, las violaciones y las enfermedades mentales.