Ha pasado mucho tiempo desde que nuestros mayores (y no tan mayores) empezaron a llamar móvil al ladrillazo de Nokia. Que levante la mano quien no haya jugado al famosísimo Snake en un teléfono parecido a éste:
Pero lo cierto es que en pocos años la cosa ha evolucionado a lo bestia y lo que conocíamos como móvil ahora se llama smartphone. Y ya no nos comunicamos llamando, porque los límites de la comunicación han cambiado. Ahora utilizamos el ‘móvil’ , según los de JWT, como un “facilitador de una amplia gama de experiencias”.
Además el móvil está afectando a las ventas de las compañías a una velocidad vertiginosa y la cuarta generación está a la vuelta de la esquina. Cuando aún no nos habíamos acostumbrado del todo a utilizar eso del 3G, que algunas veces teníamos, y otras no, ya nos hablan del 4G. Cada vez hay más consumidores conectados y cada vez se necesita que esa comunicación sea más rápida. Una locura.
Según esta agencia de publicidad las 13 tendencias a través de las cuales se desarrollará este 2013 en términos de comunicación serán las siguientes:
-Comunicación entre máquinas: cada vez más vamos a ver al consumidor interactuando únicamente con máquinas, que a la vez estarán coordinadas entre sí para ofrecer el resultado final, sin intervención alguna por parte de otras personas. Máquinas ‘hablando’ entre ellas a través de sensores integrados o lo que llamamos M2M (machine to machine). Menos interrupciones y más efectividad.
-Coches inteligentes: los fabricantes de automóviles cada vez están más en contacto con el mundillo de las aplicaciones y con las ventajas que permite tanto el 4G como la WiFi, los coches son cada vez más ‘teléfonos inteligentes, pero rápidos’. Este año podremos ver enormes ventajas en cuanto a seguridad, entretenimiento, etc... Eso sí, van a seguir sin volar, de momento.
-Un mundo conectado: los operadores móviles se han propuesto seguir ampliando el número de personas conectadas, pero para conseguirlo se necesitan terminales de menor coste, más potentes y con algún que otro replanteamiento de software y hardware. Se avecinan teléfonos buenos, bonitos y baratos.
-El móvil como fuente de oportunidades: tanto el sector económico, como el político y el social cambian y se transforman gracias a la conectividad móvil y siempre con efectos positivos. Desde este punto de vista, el móvil es la mejor herramienta para cualquiera. Con él se pueden desde realizar operaciones básicas, hasta gestionar empresas enteras.
-Revolucionando las transacciones: con un smartphone, por ejemplo, podemos realizar cualquier operación bancaria en lugares donde las tarjetas de crédito son una excepción. Esto supone que el flujo de dinero llegue a sitios a los que antes era imposible acceder.
-Gen Z: se ha llamado así a la característica propia de los llamados ‘nativos digitales’, jóvenes acostumbrados a tenerlo todo al instante y en la palma de la mano. Personas más impacientes, conectadas a todas horas y sumamente exigentes, que desafían constantemente a todo aquel que se atreva a lanzar un producto en el mercado.
-Un millón de maneras de decir ‘hola’: como ya comentábamos antes, lo de ‘teléfono’ se está separando del elemento ‘móvil’, ya que ahora mismo es una de sus aplicaciones menos utilizadas. Hay muchas otras maneras de comunicarse, que son más rápidas, más fáciles, más divertidas y, sobre todo, más baratas. Por ejemplo, mucha gente está optando por Chad2Win, una app de mensajería instantánea que encima paga a los usuarios si están dispuestos a ver algo de publicidad.
-Un cine portátil: aunque esto todavía es un poco utópico, cada vez los fabricantes están apostando más por las grandes pantallas para sus dispositivos. Por eso los usuarios cada vez tienen más costumbre de disfrutar del contenido audiovisual desde su smartphone.
-Comodidad al cuadrado: cuando nos dan todas las comodidades que tenemos hoy en día, lo único que queremos es más y más. La tendencia ahora es no tener ni siquiera que sacar nuestro teléfono y los accesorios como muñequeras, relojes y gafas están a la orden del día. Cada fabricante tiene el suyo. Todo con tal de incluir la tecnología cada vez más en nuestra rutina.
-Un asesor personal: aunque los de Apple y Google son los más conocidos, cada vez más empresas apuestan por que sus vías de comunicación cuenten con ‘asesores’ de inteligencia artificial, para que podamos encontrar el producto que queramos con solo pedirlo.
-Nuestro sexto sentido: ni callejeros, ni GPS, ni planos, ni nada. El móvil ya está implantado como un sentido más de muchos de nosotros y nos ofrece un flujo de información en tiempo real que nos facilita ser más rápidos y eficaces. Y con el mundo de las aplicaciones, todo esto se eleva a la enésima potencia.
-Una nueva vía para las marcas: la pregunta ya no es cómo pueden anunciarse las empresas en la plataforma móvil, sino qué pueden hacer para mezclarse en nuestro estilo de vida, para que las estemos viendo constantemente. Además, a través de estas nuevas formas de comunicación, las compañías cada vez podrán predecir más lo que los consumidores van a necesitar, querer o a qué van a estar abiertos.
-Compras móviles: el sistema NFC ya se ha consolidado como una de las características más útiles de los teléfonos de última generación y sus principales aplicaciones se basan en transacciones económicas. Llevar nuestro monedero y nuestras tarjetas en el smartphone será una realidad a lo largo de este año.
Parece que las empresas quieren involucrarse cada vez más con el consumidor como persona única y alejarse de la ‘masa’, y la verdad es que cada vez tienen mejores herramientas para ello. Pero la tendencia corre en favor de todos, ya que los que realmente disfrutamos de todas las ventajas y comodidades somos nosotros.
¿Para cuándo los coches voladores? ¡Si realmente es eso lo que estamos esperando todos!