Todo lo que debes saber sobre el Plan Nacional de Ciudades Inteligentes

La mitad de la humanidad vive en ciudades. La población urbana se ha multiplicado prácticamente por cinco en los últimos 60 años y se espera que las zonas urbanas sigan acogiendo a un número creciente de personas en los próximos años.

Para dar respuesta a todas sus necesidades y asegurar un entorno seguro, los gobiernos miran cada vez más hacia las smart cities, un nuevo tipo de ciudades inteligentes cuya novedad principal reside en la oferta de servicios no administrativos de manera sostenible.

Un objetivo que requiere de la alineación con el sector industrial para poder atender, entre otras, las necesidades de agua potable, transporte y prestación de servicios públicos.

No obstante, para asegurar que esta migración se realiza adecuadamente, el ministerio de Industria, Energía y Turismo ha puesto en marcha el Plan Nacional de Ciudades Inteligentes.

Qué es el Plan Nacional de Ciudades Inteligentes

Se trata de una hoja de ruta que prevé dar un impulso definitivo a la industria tecnológica de las ciudades inteligentes y ayudar así a las entidades locales en estos procesos de transformación.

Dotado con un presupuesto de 153 millones de euros, el objetivo de este plan es mejorar la eficacia y eficiencia de las entidades locales en la prestación de los servicios públicos a través del uso de las TIC y avanzar en la gobernanza del sistema de Ciudad y Destino Turístico Inteligente.

Un fin que, en último término, mejorará la calidad de vida de los ciudadanos y permitirá crear entornos atractivos de inversión que generarán crecimiento económico y empleo.

Según ha hecho saber el ministerio, el plan se coordinará a través de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, mediante la creación del Consejo Asesor de Ciudades Inteligentes.

En el proyecto participarán, además, otras entidades como Red.es, Segittur, EOI, EDAO, y representantes de la industria. La Unión Europea estima que más de la mitad de las 468 ciudades mayores de 100.000 habitantes cuentan con iniciativas en este ámbito.

Las TIC, en el centro de las smart cities

La tecnología es el vehículo con el que estas smart cities prevén dar respuesta a los nuevos retos, que llaman a una mayor eficiencia y eficacia.

El salto a estas ciudades inteligentes abre, además, la puerta al crecimiento económico y la generación de empleo. Dos bazas que en España recaen en gran medida sobre el turismo y que en 2014 le permitieron cerrar el año como el tercer país más visitado del mundo con 65 millones de turistas internacionales.


Qué es una smart city

Aunque no existe consenso en torno al concepto de smart city, se considera que una ciudad es inteligente si tiene al menos una iniciativa que aborde una o más de las siguientes características:

  • Smart Economy
  • Smart People
  • Smart Mobility
  • Smart Environment
  • Smart Governance
  • Smart Living

Así lo recogía el informe Mapping

Smart Cities

in the EU en una propuesta realizada el pasado año y que todavía hoy no hay logrado el consenso en torno a una definición única.

De todas formas, puede convenirse que la aplicación de las TIC para mejorar la calidad de vida de sus habitantes y asegurar un desarrollo económico, social y ambiental sostenible son elementos comunes a todas las definiciones.

No obstante, una de las definiciones más admitidas que figura, además, en el Plan Nacional de Ciudades Inteligentes es la siguiente:

“Ciudad inteligente (Smart City) es la visión holística de una ciudad que aplica las TIC para la mejora de la calidad de vida y la accesibilidad de sus habitantes y asegura un desarrollo sostenible económico, social y ambiental en mejora permanente. Una ciudad inteligente permite a los ciudadanos interactuar con ella de forma multidisciplinar y se adapta en tiempo real a sus necesidades, de forma eficiente en calidad y costes, ofreciendo datos abiertos, soluciones y servicios orientados a los ciudadanos como personas, para resolver los efectos del crecimiento de las ciudades, en ámbitos públicos y privados, a través de la integración innovadora de infraestructuras con sistemas de gestión inteligente”.

Como se aprecia en la definición, la tecnología y la sostenibilidad se dan la mano para resolver las necesidades que derivan de la convivencia y que requieren de eficiencia y eficacia a través de sistemas de gestión inteligentes.


Estructura del Plan Nacional de Ciudades Inteligentes

El Plan, enmarcado dentro de la Agenda Digital para España, contempla cinco ejes de actuación sobre los que articular toda su estrategia. Una de sus metas principales es conseguir que el sector industrial represente el 20% del PIB en el año 2020.

En 2013 esta cifra era del 15,9%. Para conseguir el incremento fijado, el ministerio ha establecido un decálogo de líneas a seguir y otras 97 medidas con las que aproximarse lo máximo posible a esta aportación.

Estos son los cinco ejes en que se estructura el plan:

1. Facilitar a las ciudades el proceso de transformación hacia una ciudad inteligente

El objetivo es identificar en qué situación se encuentran las entidades locales en relación al concepto de ciudad y destino inteligente y de los modelos de gobernanza que hacen posible implantarlos con éxito.

Para ello, los problemas públicos, la tipología de intervenciones y su planificación se recogerán en el llamado Libro Blanco. Un manual que evaluará la situación inicial y facilitará la transformación de las ciudades inteligentes.

2. Proyectos demostradores de la eficiencia de las TIC en la reducción de costes, mejoras en la satisfacción ciudadana y creación de nuevos modelos de negocio

Se convocarán ayudas de tres tipos: préstamos en condiciones ventajosas, impulso a la cooperación público-privada y compra pública innovadora.

Una batería de medidas con las que el ministerio apuesta por la creación de nuevos modelos de negocio que permitan maximizar los ahorros derivados del uso inteligente de la tecnología.

3. Desarrollo y crecimiento de la industria TIC

Se busca incrementar la aportación del subsector TIC al PIB del sector industrial. Para ello, este apartado incluye medidas como:

  • Elaboración de estudios para conocer en qué situación se encuentran las empresas
  • Convocatorias de ayudas públicas
  • Medidas para la internacionalización de empresas dentro de la política económica recogida en el PNR 2014 y en la Agenda para el Fortalecimiento del Sector Industrial

4. Comunicación y difusión del Plan Nacional de Ciudades Inteligentes

Es hora de hacer público este plan y asegurar su compresión por parte de la ciudadanía. Para ello, están previstas tanto la difusión de experiencias como del propio plan en sí. Todo ello con la vista puesta en orientar el desarrollo de las ciudades desde procesos que integren a los ciudadanos y promuevan la perspectiva de género.

Además se creará un portal específico www.ciudadesinteligentes.gob.es, que muestre las realidades locales y mejores las prácticas desarrolladas hasta la fecha.

5. Seguimiento del plan

Para evaluar la trayectoria del plan, el ministerio creará una oficina técnica de apoyo que dará soporte a la implementación del plan.

La gestión del plan incluye la comprobación continua de su ejecución, la rápida actuación frente a desviaciones y la evaluación y difusión de los resultados obtenidos.


Con todas estas fases, el ministerio de Industria prevé hacer de las ciudades lugares más sostenibles y conectados en los que albergar a la población instalada en las zonas urbanas. Un número que crecerá en lo que resta de década y que será determinante para lograr que el 20% del PIB provenga del sector de la industria.