Hace poco más de 4 años, Boina nacía en un garage de 2 metros por 2 metros, en la provincia argentina de Córdoba. Hoy, con un portfolio consolidado de clientes nacionales e internacionales, la agencia independiente decide extender sus horizontes para comenzar a operar en tierras europeas.
Con la motivación de crear un espacio “donde la publicidad y la felicidad se encuentren trabajando”, Boina ofrece servicios de comunicación con un amplio enfoque creativo, orientados a generar alto impacto, a bajo costo.
"Emprender nos apasiona y volver a empezar en otro lugar es algo único para nosotros; le vemos mucho potencial, así que haremos que suceda", manifestaron desde la agencia.
A partir de este mes, Boina comenzará a operar desde Barcelona, sin oficina fija y de la mano de Alejandro Ammann, su Director General Creativo. La compañía contará con una estructura flexible que dependerá de los requerimientos de cada proyecto, y que estará apoyada en el equipo multidisciplinar de talentos que la agencia mantiene en Argentina.
“No nos queremos quedar quietos y aunque en Argentina estamos felices, con una gran cartera de clientes y nuevas cuentas constantemente, creemos que es el momento de cruzar fronteras y que clientes de afuera tengan la oportunidad de conocernos y de trabajar con nosotros”, expresaron.