Así es la campaña que busca darle un “mejor final” a las botas de los peregrinos del Camino de Santiago

  • “Buen camino, mejor final” fomenta el reciclado de calzado para evitar su quema en el Cabo Finisterre
  • Es un trabajo de la agencia Yerno y la consultora 3dids para la Fabricantes de Calzado de Zaragoza

Tras recorrer cientos de kilómetros para llegar a Santiago de Compostela, y después también al Cabo Finisterre, decenas de peregrinos queman sus botas y esparcen las cenizas al mar como símbolo de la hazaña conseguida. Una falsa tradición que ha ganado popularidad en los últimos años y que cada año tiene catastróficas consecuencias en el medio ambiente y en entorno natural gallego. 

La campaña pretende promover hábitos más sostenibles y responsables

Las autoridades locales llevan tiempo trabajando para concienciar a quienes recorren el camino del impacto de este acto, que en múltiples ocasiones resulta en conatos de incendio que han de sofocar los bomberos. En las últimas semanas, el Ayuntamiento de Finisterre ha encontrado en la Asociación de Fabricantes de Calzado y Afines de Zaragoza y Provincia (AFCYA), por cuyas tierras transcurre una parte del Camino, un aliado para promover hábitos más sostenibles y responsables. 

Y es que precisamente en la Comarca aragonesa del Aranda, conocida por su tradición de trabajo del calzado, están hermanados con la causa ya que, a lo largo del último año, han visto desaparecer miles de hectáreas de sus montes y dos de sus principales fábricas a causa de los incendios. 

Es por ello que, hace unas semanas, desde AFCYA pusieron en marcha la campaña “Buen camino, mejor final”, con la intención de brindar la posibilidad de ofrecer un final alternativo a las botas de los peregrinos. De la mano del estudio creativo Yerno y la consultora 3dids, habilitaron un contenedor especial junto al mojón del km 0.0, para que los caminantes depositen sus botas usadas y, a cambio, reciban un par de zapatos nuevos fabricados por empresas de la comarca del Aranda.

Contendor para reciclaje de calzado de la campaña "Buen camino, mejor final"

Además de proporcionar nuevo calzado, la asociación creó unas cajas especiales para hacer llegar los zapatos en las que se incluía un bolsita con unas cenizas simbólicas de sus botas, a partir de los restos reciclados de éstas para reflejar que “su gesta sigue siendo eterna pero mucho más sostenible”. De cara a hacer todo ello posible, AFCYA habilito un espacio web en el que los peregrinos han podido rellenar un formulario  incluyendo datos personales de contacto, su número de pie y una descripción de las botas depositadas en el contenedor. 

Zapatos donados a los peregrinos que reciclan sus botas

Este último año hemos visto arder miles de pares en dos de nuestras fábricas, y precisamente no entendíamos cómo a día de hoy, muchos de esos peregrinos que pasan por tierras aragonesas siguen quemando sus botas al llegar al final del Camino”, ha comentado Jaime Forcén, Secretario de AFCYA, en un comunicado. En la campaña han colaborado empresas locales como Insertega (gestión de residuos textiles), el Hotel O Semáforo de Fisterra y el propio ayuntamiento, y ha contado con financiación del Gobierno de Aragón. 

Asimismo, paralelamente se puso en marcha una acción comercial, y de social selling a través de Linkedin, encaminadas a captar nuevas marcas de calzado, tanto españolas como internacionales, interesadas en trabajar con las empresas de la comarca del Aranda

Desde la agencia Yerno han compartido algunos resultados de la iniciativa, como las más de 130.000 visualizaciones en Youtube o más de 3 millones de impactos, incluyendo repercusión y cobertura en medios locales y nacionales. Consideran la campaña “Buen camino, mejor final” como un ejemplo de cómo una campaña puede trascender y convertirse en parte de la solución de un problema cultural y social. 

Más info.: Buen camino, mejor final