La Helvética es la única fuente tipográfica que tiene una película e incluso una colonia propia.
Su origen data de 1957 y originalmente fue titulada como Neue Haas Gritesk. Su diseño es obra de Max Miedinger y Edouard Hoffman. Pero muchos consideran a Mike Parker como el verdadero padre de la Helvética.
Mike Parker unió su vida a la de la Helvética de la mano de Mergenthlaer Linotype Co., la empresa fabricante de máquinas de impresión en los años 60. Como director de desarrollo tipográfico de la compañía, Parker introdujo más de 1.000 tipos de letra en la biblioteca de Linotype. Entre ellas, la Helvética.
Su afán por recopilar tipografías de todo el mundo le llevó a fijarse en la Helvética por su estilo sencillo, sin remates y sin terminaciones redondas en la base sobre la que se apoyan las letras. Tres características que convirtieron a esta tipografía en una de las más populares a finales de los años 60 y 70 y que todavía hoy se mantiene muy viva.
Mike Parker también tiene mucho que ver en la historia de los procesadores de texto.
En 1981 fundó Bitsream junto a su socio Matthew Carter. La primera empresa dedicada a la producción de fuentes digitales. Y años más tarde levantaría los cimientos de Pages Software, una empresa que desarrolló un procesador de texto para el sistema operativo NeXSTEP. Este sistema es el que Steve Jobs había creado en su primera compañía: NeXT Computers.
Pages, el procesador de texto de Mike Parker, sólo alcanzó la fase beta del proyecto antes de que se interrumpiese definitivamente en 1995. Pero cuando Jobs fundó Apple decidió conservar el nombre de Pages para sus procesadores de texto.
Mike Parker ha fallecido a los 84 años. Pero gracias a él empresas como BMW, Mattel, American Airlines, Jeep o The North Face cuentan en sus logotipos con la tipografía Helvética.