El 31 de octubre se celebra Halloween, una tradición con mucho más arraigo en Estados Unidos que en España, pero que hemos terminado por adoptar también en nuestro país junto al más tradicional 1 de noviembre, Día de Todos los Santos. Dos fechas en las que rendimos tributo al más allá y a la muerte.
A las puertas de esta celebración y conscientes de que la muerte como concepto sigue siendo un tema bastante tabú en la sociedad actual, hemos querido hacer un repaso a cómo habla de ello la publicidad. A continuación recopilamos una serie de campañas que giran en torno a la muerte.
La otra esquela
Hace sólo unos días nos llegaba a la redacción “La otra esquela”, la nueva campaña de Grupo ASV Servicios Funerarios. El objetivo es precisamente tratar de normalizar el tema de la muerte y nuestra manera de hablar de ello.
La empresa lo hace a través de una acción de Responsabilidad Social Corporativa que gira alrededor de uno de los símbolos más representativos e icónicos del sector funerario: las esquelas. “La muerte sigue siendo un tema tabú, delicado de tratar en cualquier circunstancia por la gran carga emocional que supone la pérdida de un ser querido. Precisamente por eso quisimos que la nueva campaña transmitiese un mensaje positivo y optimista que pudiese hacernos reflexionar” afirma Sonia Carricondo, Responsable del área de RSC de la compañía. En este vídeo, que además viene acompañado de un microsite específico, se trata de dar un giro a los sentimientos que provoca la muerte tratando de fomentar un nuevo concepto de esquela capaz de transmitir amor, color y sentimiento. La acción culminará precisamente este 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, con inserciones en periódicos locales de la Comunidad Valenciana y Andalucía de una selección de ‘otras esquelas’.
Pero no es la primera vez que el Grupo ASV nos habla de la muerte desde una perspectiva más vitalista. Ya en 2015 nos presentó esta otra emotiva campaña:
Seguros Santa Lucía opta por gatitos
Para sortear el tabú de la muerte, en el primer anuncio en el que se atrevía a hablar de seguros de decesos, Santa Lucía usó el recurso de los gatitos, algo que nunca falla en YouTube.
La agencia China, responsable de la campaña, lo explicaba asegurando que habían optado por una narrativa "en clave de humor" como recurso para sortear el tabú de la muerte y defendía a la marca por considerar que "abrirse a nuevos códigos de comunicación también demuestra liderazgo". La fórmula generó crítica y aplausos a partes iguales en redes sociales mientras trataba de perseguir su objetivo: hablar de la muerte de manera natural en publicidad.
Algo recurrente en seguridad vial
Además de en negocios directamente relacionados con la muerte, como las funerarias o los seguros de decesos, la muerte es también un tema recurrente en las campañas de publicidad institucional sobre seguridad vial. Es el caso de esta campaña francesa que pretende concienciar a los peatones del peligro de cruzar un semáforo en rojo.
La acción usa marquesinas interactivas para simular un accidente de tráfico. Es una campaña que nos pone la muerte delante de los ojos para que seamos conscientes de cómo evitarla y que surge del insight de que 4.500 peatones son víctimas de accidentes de tráfico cada año en París.
El insight de esta otra campaña canadiense es similar, aunque en este caso el mensaje va dirigido a los conductores que usan el teléfono móvil mientras manejan el volante.
La acción de publicidad exterior en este caso usa la psicología inversa para promover la concienciación al volante.
Aparentemente una funeraria recomienda a los conductores que escriban en sus móviles mientras conducen, algo que tendría sentido siguiendo la lógica de este negocio. Sin embargo, al entrar en su web nos damos cuenta de que la supuesta funeraria no existe. En su lugar encontramos una campaña que pretende sensibilizar sobre una conducción responsable usando psicología inversa. Se trata de una acción cuanto menos interesante que en España no sería posible porque instar a los usuarios a escribir mientras conducen no es legal.
En nuestro país, sin embargo, sí que son muy reconocidas las campañas de la Dirección General de Tráfico. Anuncios que, por lo general, buscan el impacto hablando y mostrando abiertamente imágenes relacionadas con la muerte. Es el caso, por ejemplo, de #TestimoniosdeVida que usa testimonios reales de tres víctimas de accidentes de tráfico.
En el terreno de los anuncios sobre seguridad vial encontramos un amplio espectro de estrategias, desde los que optan por mostrar la violencia de un accidente de tráfico enseñando el horror de la muerte con sangre e incluso con cuerpos como recurso, hasta los que optan por metáforas para disfrazar el impacto de la muerte recurriendo a otro tipo de emociones. En el primer grupo, encontramos ejemplos como este de Reino Unido.
Dentro de la estrategia de las metáforas está esta otra campaña: “Un minuto te cambia la vida”, también de la DGT.
También te puede interesar... La cara y la cruz de los anuncios para prevenir accidentes de tráfico
El precio de un selfie
Para concienciar sobre otro tipo de accidentes cada vez más frecuentes, los causados durante el proceso de hacerse un selfie peligroso, surgió esta otra campaña de la policía rusa.
El mensaje es muy claro y habla sin cortarse de la muerte: “Alcanzar un gran número de ‘me gusta’ puede ser un viaje a la muerte”. Acompañando al claim difundieron una serie de gráficas como en las que se plantean situaciones demasiado peligrosas para hacerse un selfie como pueden ser las vías de un tren, posando frente a un oso o mientras se conduce.
Publicidad a prueba de meteoritos
Aunque su objetivo no era hablar de la muerte en sí misma, sino de un bizcocho para el desayuno, este anuncio nos sorprendía hace sólo unos días por tirarle un meteorito encima a una de las protagonistas del vídeo.
El dramático final del anuncio ha levantado críticas aunque muchos otros consumidores sí han interpretado el mensaje con la intención que se le había dado en clave de humor.
Navidad y seres queridos
La Navidad es una época para pasar en familia y también para acordarse de los que ya no están. La muerte en este contexto fue el recurso que usó la cadena de supermercados Edeka para crear uno de los anuncios de Navidad más emotivos que recordamos.
Un abuelo finge su propia muerte consciente de que es la única manera de conseguir reunir a toda la familia por Navidad.
El éxito de la campaña fue contundente: en 24 horas superó los 2,6 millones de reproducciones en Youtube. En este caso, el claim, "Es tiempo de volver a casa", nos invita a reflexionar sobre la soledad de las personas mayores y la importancia de pasar tiempo juntos antes de que sea demasiado tarde.
En una línea similar, la Fundación Movember nos lanzaba este anuncio hace justo un año para concienciar sobre el cáncer de próstata.
“Demasiados hijos mueren antes que sus padres” es el mensaje directo de una campaña que pretende acabar con la muerte prematura de los hombres.
Incluso la moda se ha subido al carro
La muerte es incluso tema central para anuncios de firmas de moda como Louboutin que en 2014 nos sorprendía con unas gráficas en las que mostraba sus lujosos zapatos en unas piernas amputadas y envueltas para regalo. Una imagen bastante tétrica.
Otra firma de moda, la marca de El Salvador MD, también ha usado la muerte para vender zapatos.
En este anuncio, el anunciante le da un sentido literal a la popular expresión coloquial “Están de muerte”.
La chispa de la vida (y de la muerte)
Incluso la marca que identificamos con la chispa de la vida, Coca-Cola, nos ha hablado alguna vez de la muerte. En concreto, en este anuncio nos plantea la siguiente situación: ¿Te has preguntado alguna vez quién iría a tu entierro?
Toda una metáfora sobre la vida y la muerte y cómo el concepto de la chispa de la vida adquiere más sentido sabiendo que del otro lado está la muerte. Es precisamente eso lo que nos obliga a vivir cada momento más intensamente.
Superando un tabú
Los anuncios que nos hablan de la muerte, al margen de estilos y maneras de plasmarlo en la práctica, son síntoma de un tabú que se está superando y que no necesariamente nos tiene que traer a la cabeza un sentimiento negativo. Como hemos visto, a veces la intención en publicidad es justamente la opuesta: recordarnos la necesidad de vivir intensamente, animarnos a comprar los zapatos que queremos justo cuando los queremos o hacernos reflexionar sobre la necesidad de pasar más tiempo con nuestros seres queridos. Por paradójico que parezca, la publicidad también puede usar la muerte para invitarnos a ser más felices.
