Han sido dos semanas de intensa polémica para la marca de moda Balenciaga, parte del grupo Kering. La publicación de una fotografías protagonizadas por modelos infantiles sujetando peluches ataviados con elementos bondage ha provocado una tormenta de críticas, denuncias y comentarios negativos sobre el rumbo creativo de la firma y su discurso. A las disculpas presentadas hace unos días por la compañía, se suman ahora las del diseñador georgiano Demna Gvasalia, que ejerce como director creativo de Balenciaga. 

A través de una publicación en su cuenta personal de Instagram, ha pedido disculpas por la “errónea elección artística” para la campaña promocional de artículos y accesorios de regalo de la marca, de la que asegura asume su responsabilidad. “Fue inapropiado utilizar niños para promocionar objetos que no tenían nada que ver con ellos”, ha comentado en su mensaje, publicado este fin de semana. 

“Por mucho que en ocasiones quiera provocar un pensamiento a través de mi trabajo, nunca tendría la intención de hacerlo con un tema tan horrible como el abuso infantil, el cual condeno. Punto”, ha señalado. “Necesito aprender de esto, escuchar y hablar con organizaciones de protección infantil para saber cómo puedo ayudar y contribuir en este asunto tan terrible”. 

“Pido perdón a todo aquel ofendido por las imágenes y Balenciaga ha garantizado que las medidas adecuadas serán tomadas para evitar errores similares en el futuro y para tomar partido en la protección del bienestar infantil en todas las formas que podamos”; ha apuntado el diseñador. que ejerce como director artístico de Balenciaga desde el año 2015. 

En la citada campaña, junto a accesorios como bolsos, vasos, posavasos, gafas, collares o pulseras, los niños y niñas fotografiados aparecían sujetando o al lado de osos de peluche que lucen arneses de cuero y correas. Las imágenes fueron tildadas de ofensivas y sexualizantes y los usuarios de las redes sociales vertieron acusaciones de apología de la pedofilia y la pornografía infantil. 

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Las acciones tomadas por Balenciaga

Por su parte, Balenciaga ha dado a conocer algunas de las medidas puestas en marcha de cara a “aprender de sus errores como organización", tal y como ha compartido a través de su perfil de Instagram, del cual borró hace días todo el contenido publicado. “Nuestro actual proceso de validación de contenido y reconocemos la necesidad de hacerlo mejor”, ha comentado la compañía. En esta línea, asegura haber nombrado con efecto inmediato una “junta de imagen”, responsable de evaluar la naturaleza del contenido, desde el concepto hasta los recursos finales, incluyendo expertos en legalidad, sostenibilidad, y diversidad. Asimismo, en el plano externo, señala haber contratado una “agencia de primer nivel” para evaluar el contenido. 

Por otro lado, Balenciaga también ha destacado una reorganización de su departamento de imagen para asegurar la plena alineación con los principios corporativos. Y ha señalado que ha decidido no entrar en litigios, pese a haber señalado que estaba tomando las acciones legales respecto a los responsables del set de otra de sus campañas, la de la colección de primavera 2023. 

Asimismo, ha expresado su voluntad de aprender y contribuir. “Queremos aprender, ayudar y contribuir a la protección infantil. Estamos iniciando formaciones sobre comunicación responsable en nuestros equipos y nos embarcaremos en un ”listening tour" para hablar con organizaciones y asociaciones enfocados en la protección infantil"; indica el post, firmado Cédric Charbit, Presidente y CEO de Balenciaga. A este respecto, señala que la marca ha creado un fondo para donaciones a organizaciones “para ayudar a marcar la diferencia en la protección infantil”. 

“Quiero reiterar personalmente mis sinceras disculpas por la ofensa causada y tomar mi responsabilidad”, ha apuntado Charbit al término de la publicación. “En Balenciaga nos posicionamos a favor de la seguridad infantil y no toleramos ningún mensaje de violencia u odio”.