Muchos de los cambios y transformaciones que se han consolidado en los últimos meses, son tendencias que se venían observando en el mercado y la sociedad antes de la pandemia. El coronavirus ha sido, en muchos sentidos, y para bien y para mal, un acelerador de cuestiones como la digitalización, el modelo laboral híbridos, el consumo audiovisual o la comunicación a través de redes sociales y plataformas digitales.
Antoñanzas analizó el funcionamiento de los algoritmos de las redes sociales en Monzón Summit 2022
Estas últimas han adquirido tal relevancia en nuestro día a día que están dando forma a las relaciones y la psicología humana, así como moldeando conceptos como la popularidad o el éxito. Así lo expuso Diego Antoñanzas en Monzón Summit 2022, el primer congreso de Marketing de Influencia de España, en la sesión titulada “Dependencia psicológica y éxito efímero”. El evento se celebró entre los días 10 y 12 de marzo en el Castillo Templario de Monzón (Huesca) y fue co-creado por Reason.Why y Mileniarts gracias a la iniciativa del Ayuntamiento de Monzón.
Diego Antoñanzas es más popularmente conocido en redes sociales como El Profesor de TikTok, donde acumula más de 2,2 millones de seguidores. Tras desarrollar su trayectoria profesional en la agencia Comunica+A y las compañías Siemens Mobile y Heineken, la pérdida de un familiar cercano le impulsó a dar un giro radical a su vida personal y profesional. Desde ese momento, se desempeña como ponente y conferenciante para empresas y particulares, y como Director de la agencia de visitas turísticas Madrid and You, de la que también es Fundador.
Todo ello lo compagina con su actividad en como creador de contenido en redes sociales, una faceta que comenzó a desarrollar especialmente a raíz del impacto de la pandemia en nuestro país. Las sesiones que impartía sobre motivación o transformación digital se transformaron en ponencias sobre la gestión del miedo y la incertidumbre. “Investigando en redes sobre el miedo, me di cuenta que todas aquellas noticias que tenían como tema principal el coronavirus tenían los mismos comentarios asociados: tengo miedo”, explica Antoñanzas. “Nadie estaba explicando a los chavales qué era el coronavirus. Me preguntaba qué podía hacer yo para que tuvieran menos miedo. No podía ser padre, madre o amigo. Así que me propuse ser un profesor”.
La dependencia del algoritmo
Así es como se convirtió en El Profesor de TikTok, un alter ego digital enfocado, entre otras cosas, a contribuir a quitarles el miedo y fomentar la felicidad de las nuevas generaciones. A lo largo de los dos últimos años, y atendiendo a su interés por la tecnología, Diego Antoñanzas también ha profundizado en el funcionamiento de los algoritmos que mueven las redes sociales. “El algoritmo pretende que estemos enganchados a la red social. Las redes son gratuitas, y por tanto el precio son los datos. Esos datos se usan para mostrarnos aquellos que sabe que nos gusta. Y eso produce dependencia. Funciona como una droga”, ha comentado el conferenciante.
Concretamente, Antoñanzas ha explicado cómo funciona el cerebro en lo que respecta no solo a las redes sociales, sino al placer. El sistema límbico es el responsable de las emociones, y cuestiones como la motivación o la conducta; mientras que la parte cortical está vinculada al juicio, el pensamiento o la toma de decisiones. “Los algoritmos han conseguido anular esa relación circular y engañar al cerebro para darnos aquello que sabe que nos gusta. Nos quedamos enganchados y la parte que se supone nos tiene que frenar no funciona. Es lo que se llama el circuito de la recompensa”.
“Muchos jóvenes tienen completamente equivocado el concepto de la felicidad”
Esta dependencia de las redes sociales ha generado miedos como la “nomofobia” (no mobile phobia), relativa a la ansiedad generada por no disponer del teléfono móvil; o el FOMO, acrónimo de “Fear Of Missing Out", vinculado al miedo de no estar al día con la actualidad. Todas estas cuestiones están afectando a la vida social, e incluso a la integridad física de miles de jóvenes. “Algo está pasando cuando la tasa de suicidio entre adolescentes en España se ha multiplicado”, señala Antoñanzas. “Es gente que tiene completamente equivocado el concepto de la felicidad. Una de las cosas que he descubierto durante la pandemia es que la felicidad no está en lo que los demás puedan decir. No está en los likes que pueda conseguir o en la cantidad de views que tengan mis videos”.
Unas de las máximas expresiones de la dependencia de las redes sociales y del éxito efímero sobre el que reflexionó Diego Antoñanzas son algunos de los métodos que los usuarios de TikTok han encontrado para “hackear” y alterar de forma manual al algoritmo. Algunos usuarios han desarrollado sistemas que imprimen, con algunos minutos de retraso, los likes y comentarios que reciben durante vídeos en directo, lo que lleva a los espectadores a conectarse y permanecer atentos hasta que ven salir su usuario en el papel. “El algoritmo aprende que al usuario le interesa ese vídeo, y lo expone más. Es un círculo vicioso terrible. Pero aquí hay un problema, porque estamos creando gente enganchada”.
Una cuestión social
Diego Antoñanzas considera que, ante el desarrollo del metaverso y los universos digitales, esta dependencia podría empeorar. "Lo primero es ser conscientes si estamos enganchados. Si no podemos disfrutar de un día con nuestra pareja sin el teléfono. Si hay irritabilidad cuando el móvil esta apagado o sin batería. Si la comunicación con nuestros familiares u amigos siempre es a través de una aplicación. Es importante darse cuenta de esto, para poder abordarlo y tratarlo”. Para esto, El Profesor de TikTok recomienda practicar la meditación, usar aplicaciones de limitan el tiempo de uso del smartphone, practicar deporte, evitar entrar en determinadas habitaciones con el dispositivo o recurrir a ayuda psicológica o médica si es necesario.
Antoñanzas compartió también, ante las preguntas formuladas por los asistentes, que él también ha visto afectado su ego a partir de su popularidad. “Lo importante es aprender todos los días a poner los pies en la tierra, a trabajar la mente”, explicó. Del mismo modo, aseguró haber sido víctima de los constantes insultos que se mueven en las redes sociales, los mismos que reciben en numerosas ocasiones los jóvenes a los que trata de ayudar con sus contenidos. “El bullying se amplifica en redes sociales, y además, se empeora porque se hace desde el anonimato. Como sociedad, debemos trabajar la salud mental y abordar estos temas entre todos”.
Diego Antoñanzas, El Profesor de TikTok, concluyó su intervención invitándonos, por un lado, a centrarnos en las cosas realmente importantes de la vida, como pasar tiempo con los seres queridos o disfrutar de aquello que nos hace felices; y, por otro, a prestar atención a nuestros hábitos en redes sociales. Para ello, recurrió a una frase atribuida tradicionalmente al pensador Confucio: "Tenemos dos vidas. La segunda comienza cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una”.