El segundo motor de búsqueda más importante a nivel mundial se une a la lucha contra el “Porno por venganza”. Bing, buscador propiedad de Microsoft, corta los accesos a este tipo de contenido, después de que Google lo hiciera en junio de este año. Además de en el buscador, Microsoft también eliminará los enlaces de Xbox Live, la red de juegos online de Xbox, y OneDrive, el servicio de almacenamiento en la nube.
El “Porno por venganza” consiste en la publicación de imágenes o vídeos de contenido sexual de personas conocidas, normalmente ex-parejas. El objetivo es dañar su reputación e imagen pública. Las consecuencias para las víctimas suelen ser experiencias traumáticas y humillación social. Con la alianza de Google y Microsoft, ahora las víctimas de “Porno por venganza” pueden avanzar en su lucha por retirar el material dañino.
Factores en contra de la erradicación del contenido sexual
El primer factor a tener en cuenta es que ambos motores de búsqueda representan el 87,7% del mercado de buscadores estadounidense, por lo que pueden disminuir el problema en gran medida, pero no eliminarlo.
Además, ningún motor de búsqueda puede identificar si un contenido es “Porno por venganza” por sí mismo. Las víctimas son las que deben conocer si existe algún material que dañe su imagen en Internet, para poder ponerse en contacto con Google y Microsoft y pedir que retiren el contenido. Ambas compañías han habilitado una web para este tipo de reportes.
El “Porno por venganza” en el mundo off-line
Afortunadamente los gobiernos están empezando a percatarse del problema y tomando cartas en el asunto.
En California condenaron al jefe de una página web de “Porno por venganza” por 27 cargos graves, entre los que se incluían extorsión y robo de identidad.
Aunque también en el Reino Unido se ha impartido justicia. En noviembre de 2014 un hombre fue encarcelado durante 12 semanas por poner una foto de su ex-novia desnuda como foto de perfil de Whatsapp. En el país británico también han habilitado un teléfono de atención a las víctimas. Además han promulgado una nueva ley, por la que aquellas personas que compartan imágenes explícitas sin consentimiento podrán ser encarceladas hasta 2 años.