Las webs de e-commerce suelen enfrentarse a dos barreras fundamentales:

• Falta de tráfico porque no se ha segmentado bien
• Baja tasa de conversión de las visitas en compras

De las dos barreras, la segunda es la más grave porque, una vez que se ha conseguido dirigir tráfico suficiente al e-commerce, hay algo que está fallando para que esas visitas no se traduzcan en compras.

Pero el abandono del carrito de la compra se puede evitar. Os dejamos con algunos consejos para conseguirlo:

Permitir la compra sin registro
Cuantos menos pasos tenga que dar el usuario para hacer una compra online, mejor. Y es que el registro, en muchas ocasiones, “fulmina” la conversión. Es cierto que no hay nada mejor que la compra de un usuario registrado pero, como la conversión es la meta número uno en un e-commerce, es mejor dar la opción de hacer una compra sin registro, como usuario invitado.

Hacer un call-to-action realmente efectivo
Si los botones de “Comprar ahora”, “Añadir a la cesta” o “Finalizar pedido” no están colocados en un lugar visible, ¿cómo vamos a mejorar la tasa de conversión? La norma general es colocar estos botones en la esquina superior derecha del e-commerce. Pero se puede experimentar con la ubicación siempre y cuando los botones sean grandes y visibles.

Garantizar la seguridad
Uno de los grandes frenos al proceso de compra online es la seguridad. Si el usuario no tiene la sensación de que sus datos personales y bancarios van a ser tratados con la máxima seguridad, entonces no efectuará la compra. Añadir un sello de certificación online o una política de privacidad hará que el consumidor se sienta más protegido en la página.

Opciones, las justas
Los estudios aseguran que ofrecer al usuario demasiadas opciones durante el proceso de compra confunde más que otra cosa. Así, opciones como fecha de entrega, envoltorio para regalo o modo de pago deberían simplificarse de forma que el consumidor pueda elegir alguna de ellas de forma rápida e intuitiva. Y siempre al final del proceso de compra, para no alargarlo demasiado.

Recordar a los usuarios internacionales
Una de las ventajas del e-commerce es la eliminación de fronteras. Una tienda online que cuente con un 10-15% del tráfico procedente de otros países deberá tener una serie de aspectos en cuenta.

• Si no se va a vender en el extranjero, hay que indicarlo en la web
• Si se va a vender en el extranjero hay que dar facilidades en cuanto a idioma, precio de los productos, dirección de entrega y/o facturación…

Muchas webs de e-commerce han mejorado sus tasas de conversión siguiendo estos consejos. Quizá alguno de ellos te sea útil para acabar con el abandono del carrito de la compra en tu página ;)