Las mayúsculas en los emails generan ansiedad en el destinatario

No existe una regla universal que contemple la fórmula perfecta para que la tasa de apertura de los emails sea total. Sin embargo, sí que hay unas reglas básicas que cualquier profesional del email marketing debería conocer: personalización, brevedad, ofertas...

Buscar un manual universal que nos conduzca hacia el éxito de nuestras campañas de email marketing es como buscar una aguja en un pajar. No es fácil determinar qué factores son los que más influyen en la tasa de apertura y lectura de los correos electrónicos.

 

Esta realidad se vuelve aún más cruda si tenemos en cuenta que la mayor parte de los emails ahora se lee desde dispositivos móviles. Es decir, los correos electrónicos compiten con más distracciones cada vez. Por tanto, para los profesionales del email marketing es todo un reto hacer llegar sus mensajes al público objetivo.

 

¿Cómo hacer que nuestros emails estén dentro del 42% de los considerados como importantes? A continuación os contamos las reglas básicas que toda campaña de email marketing debe contemplar:

 

Asunto breve

Que la mayor parte de usuarios lee los emails desde los smartphones es un hecho que todo marketer debe tener en cuenta. Según Kipp Bodnar, vicepresidente de la plataforma de software de marketing HubSpot, escribir mensajes demasiado largos que no están pensados para mobile es uno de los errores más comunes entre los profesionales.

 

La caja de texto del asunto del email permite aproximadamente 60 caracteres, mientras que el móvil sólo muestra 25-30 en un primer vistazo. ¿La recomendación? Entre 6 y 8 palabras como máximo.

 

Las palabras más importantes, al inicio

Como si de un anuncio que pretende captar nuestra atención se tratase. El email debe ser capaz de despertar nuestro interés en el menor tiempo posible. Además, en la línea de la recomendación anterior, este consejo es cada vez más importante si tenemos en cuenta los momentos que dedicamos a leer los correos con los dispositivos móviles. Los emails cada vez compiten con más distracciones.

 

Subrayar el valor de la oferta

Si el objetivo del email es ofrecer algo de valor al destinatario, es clave transmitirlo en el asunto o en las primeras líneas del mensaje. Si no, posiblemente estemos perdiendo una gran oportunidad. Este consejo es especialmente útil en aquellos correos que proponen descuentos, promociones, servicios gratis o regalos.

 

Simplicidad

Las frases enrevesadas no tienen cabida en el lenguaje de los emails. Los marketers tienen que ser capaces de enfocar y resumir su mensaje principal en una sola idea.

 

La llamada a la acción

El buzón de correos electrónicos tampoco es el lugar para pedir demasiado al destinatario. Aunque es inevitable que muchos emails soliciten la participación del usuario (clicar en un link, responder...), el profesional debe ser consciente de que no puede pedirle demasiado. ¿Qué es demasiado? Invitarle a que reenvíe el email a todos sus contactos, por ejemplo.

 

Añadir límites de tiempo

Muchos emails no dejan de ser una oferta y por ello comparten muchas de sus cualidades. Por ejemplo, añadir una fecha límite como “Regístrate hoy” o  “La oferta termina hoy” tiene resultados bastante positivos. Estos mensajes generan una sensación de urgencia en el destinatario.

 

Personalización

Aunque pueda parecer un consejo resabido por todos, todavía siguen entrando emails sin personalizar en nuestras bandejas de entrada. Los expertos recomiendan conocer el nombre de la persona o empresa a la que se dirige el correo en cuestión. Leer el propio nombre genera una predisposición más positiva.

 

Las mayúsculas generan ansiedad

Incluir mayúsculas y signos de exclamación no es una buena idea. El usuario tendrá la sensación de que le están gritando y no dudará en enviar el mensaje a la papelera sin ni siquiera haberlo leído.

 

Todos estos consejos son orientaciones generales sobre cómo implementar una estrategia de email marketing sin saltarnos los aspectos más básicos de ésta. Si lo que buscáis es inmediatez en la respuesta, quizá estos cuatro consejos sobre qué formas de comunicación usar en función de la urgencia de la respuesta os sean útiles. 

 

 

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