¿De quién son los datos?

  • Fernando Polo, CEO de Good Rebels, ha hablado de la relación entre marketing y blockchain durante eShow Barcelona 2018
  • “Si mis datos (como mis playlists) están en Spotify y quiero pasarlos a Apple, no puedo. Mis datos no son míos”
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El segundo día de eShow Barcelona comenzó fuerte con la charla de Fernando Polo, CEO de Good Rebels: “Cómo será el marketing en la era Blockchain”.

El futuro del marketing podría residir en el blockchain

¿Cómo se relacionan el blockchain y el marketing? Pues ambos conceptos, en principio opuestos, podrían estar cada vez más relacionados. Y el futuro del marketing podría residir en la tecnología blockchain.

Empecemos por lo primero: ¿de quién son los datos?  El CEO de Good Rebels recordaba que “los datos son de dos: tanto de las compañías que los recogen como del consumidor. Toda transacción pertenece a ambas partes. Sin embargo, si yo doy mis datos a Spotify (como mis listas de reproducción en las que invierto tiempo y energía), no puedo luego trasladarlas a Apple si así lo decido, por ejemplo. ¿Por qué?”.

Y si hablamos de datos estos días no podemos dejar de mencionar a Facebook, Mark Zuckerberg, y todo el escándalo de Cambridge Analytica. “Vamos a pagar todos por el mal uso de los datos que han hecho unos cuantos”.

Entonces, ¿cómo se protegen los datos? Que no cunda el pánico, porque la solución no es eliminar tu perfil de Facebook o desaparecer de la faz de la World Wide Web. La clave podría estar, precisamente, en manos del fundador de esta última: Prof. Tim Berners-Lee. Es él quien está al frente de Solid, una iniciativa desarrollada junto a MIT.

El fundador del World Wide Web quiere que el consumidor recupere el control de sus datos

El objetivo de este proyecto es cambiar de forma radical cómo las aplicaciones web trabajan actualmente. Su misión suena casi idílica: que el usuario recupere sus datos, decidiendo quién accede a ellos. Y que no esté en mano de las aplicaciones (Facebook, Twitter, Google…), sino que estas los obtengan de forma momentánea cuando el consumidor así lo elija. Ah, y basándose en blockchain, claro.

Otra posibilidad es dock.io, un protocolo de intercambio de datos basado en Ethereum. La idea es muy similar a Solid: una plataforma de datos que el consumidor controla y ellos simplemente lo almacenan.

Y si todo va bien, ¿dónde terminaremos? Fernando Polo, con ayuda de un pequeño montaje, se imaginaba el día en que terminaremos con una pantalla de privacidad en nuestro smartphone donde marcaremos qué marcas podrán acceder a nuestra información. Algo parecido a lo que ya sucede con los servicios de localización.

Realidad o ficción, ya sabíamos que los datos son el petróleo del siglo XXI. Pero ahora tenemos a un usuario cada vez más consciente del valor de los mismos. Y por eso las reglas del juego están cambiando.