El nuevo establecimiento de Starbucks en Los Ángeles ha sido calificado como “el más deprimente”, “un verdadero horror” o “una cárcel”.

La tienda, ubicada en el vecindario de Highland Park, es tan escueta que sólo cuenta con un aseo y una pequeña ventanilla para hacer los pedidos. No tiene mobiliario interior, espacios para sentarse o mesas para apoyar el café.

Desde que abrió hace un par de semanas, los consumidores lo han criticado en las redes sociales con calificativos que van desde “grotesco” hasta “insultante”. Además, seis reseñas diferentes en Yelp lo comparan con una cárcel.

Y es que la empresa tiene como misión, o al menos así lo ha manifestado siempre hasta ahora, “reflejar el carácter del vecindario” en el diseño de sus establecimientos. No es de extrañar que los vecinos de Highland Park se hayan indignado, teniendo en cuenta que su barrio no tiene nada que ver con el Starbucks que se ha instalado allí. ¡Highland Park fue elegido como el mejor vecindario de Los Ángeles en 2013!