Nueva Zelanda seguirá los pasos de Francia y eliminará los logos del packaging de tabaco. De hecho, sus planes pasan por que los paquetes se vendan con fondo plano y con imágenes de advertencia sanitaria que cubran al menos el 75% de la parte frontal.
La propuesta cuenta con un amplio apoyo de los legisladores y llega poco después de que el Gobierno anucniara una medida fiscal que alzaba el precio de un paquete de cigarrillos a 30 dólares neozelandeses (17,97€). Es más, oficialmente, la eliminación de los logos podría aprobarse el próximo año con los cambios de impuestos. De este modo, Nueva Zelanda se sumaría a la larga lista de países que ha seguido esta medida iniciada por Australia en 2012.
De camino al empaquetado genérico
Nueva Zelanda anunció en 2013 sus planes de dirigirse hacia el empaquetado genérico. Sin embargo, la legislación no consiguió avanzar. Y ahora que se ha vuelto a poner en marcha, no le faltan detractores. La sucursal neozelandesa de British American Tobacco afirmó que la Ley había sido un fracaso en Australia, por lo que Nueva Zelanda no debía continuar con sus planes. Al menos, no hasta que se tomaran decisiones sobre un paquete sencillo en la Organización Mundial del Comercio.
Mientras tanto, el ministro de Salud Sam Lotu-Liga dice que las enfermedades relacionadas con el tabaco matan en Nueva Zelanda a una docena de personas todos los días y los paquetes son una poderosa herramienta de Marketing para las empresas tabacaleras. Algo que se enfrenta a su objetivo: conseguir eliminar el tabaquismo en Nueva Zelanda en 2025.