100 Montaditos no ha tenido lo que se dice una buena aventura en el mercado estadounidense, pero aun así ha conseguido solventar la situación. La cadena del Grupo Restalia se declaró en bancarrota el pasado mes de marzo.
Todo ocurrió tras un salto a Estados Unidos, en 2011, bajo la matriz 100M Holding. Aunque se marcaron el ambicioso objetivo de crecer hasta los 4.000 establecimientos en todo el continente americano, tres años después a esa cifra le sobraban dos ceros. Finalmente, la cadena de restauración terminó entrando en concurso de acreedores.
Ahora, un tribunal de Miami permitido a 100M Holding que se acoja al capítulo 11 de la ley de protección por bancarrota. Con esta decisión, la empresa podrá liquidar las deudas que mantiene tanto con franquiciados como con proveedores, con el fin de sanear su economía.
“Se ha cerrado un capítulo y a partir de ahora la compañía deberá reorganizarse para coger fuerzas”, ha explicado, Rosa Madrid, miembro del Consejo de Administración de la compañía.
Resistiendo tras la bancarrota
Tras la decisión, tomada por los malos resultados de las franquicias, principalmente en el estado de Florida, la compañía siguió operando, según Madrid, “con mucha fortaleza” y “funcionando bien”.
En este sentido, tanto 100M Holding como 100 M Operator, 100 M Lincoln, 100 M Franchise, y 9 de los restaurantes que la compañía tenía en el estado de Florida y Virginia se acogieron al “Chapter 11”.
Tal y como ha explicado la compañía, la deuda con proveedores y franquiciados asciende a 200 millones de dólares, de los cuales 100M Holding ha depositado el 33% ante el juzgado de Miami.
Con este depósito, la compañía salda sus deudas con franquiciados y proveedores y seguirá operando en el mercado estadounidense. “Aquí el hecho de entrar en concurso de acreedores no supone un estigma para las empresas como, por desgracia, sucede en la mayoría de los casos en España. Tenemos claro que es un mercado prioritario para nosotros, especialmente Miami, aunque queremos trabajar con mucha prudencia y analizando en profundidad cada ubicación“, ha indicado Madrid.
En palabras de Rosa Madrid, "el capítulo 11 nos ha ayudado, ha sido una herramienta para corregir algunos errores de gestión y para reorientar el crecimiento de la compañía. Podíamos haber cerrado, tirar la toalla y marcharnos, pero elegimos seguir este camino que requiere mucho más esfuerzo y supone una apuesta por Norteamérica, desde el punto de vista de la marca", ha concluido Madrid.