“The Newsroom”, serie de televisión americana creada por Aaron Sorkin para HBO, no sólo muestra el trabajo de una redacción de periodistas en una cadena de televisión. La serie va un paso más allá estableciendo las bases, barreras y conflictos de un oficio que ha encontrado en internet su gran aliado así como su mayor enemigo.
El inicio de la serie son ocho minutos magistrales que culminan en un discurso de su protagonista, Will McAvoy, diciendo lo que nadie en la sala quiere escuchar.
“América no es el mejor país del mundo. Solíamos serlo. Defendíamos lo que era justo. Luchábamos por razones morales”. Y continúa… “Actuábamos como hombres, aspirábamos a la inteligencia, no la despreciábamos, no nos hacía sentirnos inferiores. No nos identificábamos por a quién habíamos votado en las últimas elecciones, y no, no teníamos miedo. Éramos capaces de ser y hacer todas esas cosas porque estábamos informados por grandes hombres. Hombres reverenciados. El primer paso para resolver un problema es reconocer que existe”.
Pero el discurso con el que comienza es sólo una primera muestra de lo que vendrá después. A pesar de que la serie se emitió entre 2012 y 2014, las lecciones que nos ha dejado siguen siendo tan actuales y relevantes como el primer día.
A lo largo de las tres temporadas se destaca la importancia del periodismo en relación con el mundo de la política. Un buen ejemplo es la disculpa con la que el protagonista Will McAvoy comienza uno de sus informativos, pidiendo perdón por no informar y educar al público como debería haberse hecho.
Y es que el ejercicio de auto-reflexión debería ser una constante para cualquier periodista: ejercer la autocrítica para comprobar que se continúa trabajando para conseguir el objetivo inicial. “Fallamos a la hora de informar al público sobre los enormes cambios que estaban arrasando nuestra sociedad, desde la caída del sector financiero hasta la realidad sobre qué fuertes somos o las amenazas a las que nos enfrentamos“.
Remarcan con frecuencia la importancia del periodismo en democracia: "No hay nada más importante en democracia que un electorado bien informado. Cuando no hay información, o peor aún, mala información, pueden producirse decisiones equivocadas y abortarse cualquier intento de debate, por eso produzco las noticias".
Y buscan recuperar la posición de los medios de comunicación como cuarto poder, actuar como un recordatorio de la influencia que tienen sobre la opinión pública. “Recuperando el cuarto poder. Recuperando el periodismo como una profesión honorable. Un telediario nocturno que informe sobre un debate acorde con una gran nación. Civilizado, respetuoso y que vuelva a lo que es realmente importante. El fin de la irritabilidad, del cotilleo y del voyerismo. Rebatir la estupidez con la verdad”.
La serie también nos ha dejado alguna frase que demuestra el lado más humano de la profesión. No solo a la hora de informar, sino también a la hora de influir sobre el estado anímico y energía de la sociedad. “Han pasado nueve años, siete meses y 20 días desde que el criminal más buscado por América acabó con la vida de 2.977 personas: hijos, padres, madres, amigos y compañeros. Esa mañana nos transformamos en un país distinto, uno con más miedo y, como consecuencia, más hostil. Aunque nada, ni siquiera esta victoria, puede traer de vueltas las almas que se perdieron esa mañana en Nueva York, Virginia, Pennsylvania, y alrededor del mundo, dejemos que esta noche sirva para recordar que a lo largo de la historia los días más oscuros de América han sido seguidos por sus mejores momentos”.
The Newsroom en la era de #fakenews
La serie dejó de emitirse en 2014, justo antes de la “explosión” del término fake news. Sin embargo el tema aparece de forma recurrente. Y es que uno de los principales hilos es el conflicto entre periodismo y empresa, que ha terminado siendo uno de los desencadenantes de las fake news.
El enfrentamiento entre la rentabilidad financiera de los medios de comunicación como empresa contra la tarea (y el deber) de informar, no es ni mucho menos nuevo. Y “The Newsroom” ataja el tema con humor en ocasiones, porque al fin y al cabo...
O, de un modo más macabro, haciendo referencia a los fallecimientos falsos que de forma recurrente se producen en redes sociales. “Es una persona. Un médico dice si está muerta. No las noticias”
En cualquier caso, parece que la serie asume que las fake news siempre van a acompañar al periodismo; como dice MacKenzie McHale a Will McAvoy en el primer episodio: “Son muy jóvenes todavía para hacer malas noticias”.