Jan Koum y Brian Acton, dos ex empleados de Yahoo, fueron los fundadores de WhatsApp. La aplicación de mensajería instantánea, que supera los 1000 millones de usuarios en todo el mundo, es propiedad de Facebook, en una de las operaciones más sonadas de los últimos años.
Pero no todo han sido rosas en el camino hacia el éxito. Jan Koum, uno de los fundadores de WhatsApp, vivió en la indigencia cuando llegó a América hace más de 20 años.
La historia de Jan Koum, uno de los fundadores de WhatsApp
El ucraniano abandonó su país natal con su madre cuando aún era muy joven. Jan se ganaba la vida limpiado suelos en una tienda de alimentación. Y no era precisamente un estudiante modelo. Acudía junto a su madre al comedor social del barrio en busca de ayuda. Una experiencia que le marcaría de por vida.
Pero a los 18 años su vida cambió cuando empezó a estudiar programación con manuales de segunda mano. Finalmente ingresó en la Universidad Pública de San José donde llevó a cabo prácticas en empresas de la talla de Ernst & Young y más tarde en Yahoo. En esta última es donde conoció a Brian Acton, amigo y mentor con el que acabaría fundando WhatsApp.
En 2007 ambos dejaron Yahoo y se dedicaron a echar currículos en otras empresas. Incluso en Facebook, donde les rechazaron.
Dos años más tarde Jan Koum empezó a mostrar interés por el mundo de las aplicaciones móviles gracias al desarrollo de un servicio de mensajería para iPhone. Tuvo varias ideas, una de ellas relacionada con mostrar cuándo un contacto estaba conectado o no a su smartphone. Un servicio que más tarde incorporaría a WhatsApp.
El 24 de febrero de 2009 Jan Koum y Brian Acton fundaron WhatsApp Inc. en California. El nombre de la aplicación procede de la expresión inglesa “What’s up?” (¿Qué pasa?).
Sin embargo, meses después de su lanzamiento, WhatsApp no despegaba y veía peligrar su continuidad.
Los inicios de WhatsApp
Las inversiones de antiguos compañeros de Yahoo sirvieron para mantener la aplicación en funcionamiento hasta que en 2011 el fondo de capital Sequoia invirtió 8 millones de dólares en WhatsApp. En ese momento WhatsApp despegó y creció hasta convertirse en la aplicación de mensajería móvil líder del mercado actual.
Koum siempre se ha mantenido muy fiel a sus raíces humildes. En una entrevista a la revista Wired declaraba la opresión que vivieron amigos y familiares en Ucrania “sólo por contar anécdotas de líderes comunistas”.
Este excesivo control es lo que le llevó a desechar la idea de una aplicación destinada a “vigilar” a sus usuarios en favor de una destinada a la comunicación libre y simple. Una de las razones que, precisamente, más éxito le ha reportado y que fue determinante en el acuerdo de compra firmado con Facebook.
Precisamente Koum firmó dicho acuerdo de venta por 16.000 millones de dólares en la puerta del comedor social al que acudía con su madre cuando llegó a EEUU. Y lo hizo pese a tener una fortuna propia estimada en 6.800 millones de euros.