Esta semana se está celebrando la conferencia SXSW Interactive en el hotel Hilton de Austin, Texas. Uno de los últimos en subirse al escenario ha sido el experto en Marketing y profesor de la Wharton School, Jonah Berger.
Su conferencia se centró en un concepto muy old school para el sector publicitario: el boca-oreja.
“El boca-oreja todavía es muy poderoso”, asegura entusiasmado el profesor Berger cuando habla de este tema. Un concepto con muchos años de recorrido, pero no por ello menos fascinante.
Y es que, para desgracia del sector de la Publicidad, los consumidores confían cada vez menos en los anuncios, incluso en aquellos protagonizados por personajes famosos. “El boca-oreja es 10 veces más efectivo que un anuncio tradicional”, aseguró Berger durante su ponencia en SXSW.
“Los consumidores confían en sus amigos”, añadió.
Jonah Berger ha realizado recientemente una investigación de la que ha extraído el interesante dato de que sólo el 7% del boca-oreja es online. Así que la mejor forma de comprender este fenómeno es comprendiendo a la gente en situaciones reales, offline. Así es como lo explica este experto en marketing en su obra ‘Contagious’, en la que ofrece algunas razones por las que la gente comparte información con otras personas.
Pagar con la moneda social
Berger define la moneda de cambio social como el poder tener acceso a lo que la gente da valor, a cambio de más valor.
Allá donde la gente sienta que está como en casa, o allá donde la gente sienta exclusividad, tendrá deseos de compartirlo con sus amigos.
Un buen ejemplo de esto son las fiestas: “Hay una lista de invitados que permite el acceso exclusivo a unos pocos. Los que entren, desearán compartirlo con los demás”.
Jonah Berger ponía el propio ejemplo del evento en el que daba su conferencia. “Todos vosotros estáis tuiteando sobre la South by, y la South by está creciendo por ello como marca”.
Para las marcas lo más importante es tener siempre en mente al consumidor y comprender las implicaciones sociales del producto en cuestión. Si el sector comprende eso, las estrategias de boca-oreja tendrán mucho más éxito.
Los disparadores
Un elemento básico del boca-oreja es el disparador.
Berger puso el ejemplo del anuncio de Geico con el camello que se pasea por una oficina un miércoles preguntando a todo el mundo qué día de la semana es...
“No es un anuncio particularmente brillante, pero ha funcionado muy bien. Cuando me puse a echarle un ojo a los datos, me di cuenta de que cada miércoles se generaba una conversación social sobre el anuncio precisamente por el día de la semana que era”.
En resumen: si está en el top of mind, se hablará de ello. Sea lo que sea.