Los españoles van incorporando poco a poco a sus hábitos la compra online. Aunque no todos los productos presentan los mismo índices de consumo.
Por ejemplo, según los datos recogidos por Nielsen en el estudio “Comercio Conectado”, dos de cada tres consumidores organizan sus viajes en la Red, convirtiéndose el canal online en un indispensable para la compra de billetes de avión o la reserva de habitaciones de hotel.
Y es que los españoles han interiorizado la compra onine para su ocio. De hecho, las entradas para eventos se obtienen en un 58% de los casos a través de este canal. Mientras que la compra de moda complementa el Top 3 de los productos adquiridos en línea.
La alimentación, una tarea pendiente
Pese a que el consumo de ocio a través de Internet ha tenido muy buena acogida entre los españoles, hay productos que aún no se acaban de hacer un hueco en las cestas de compra digitales.
La alimentación se lleva los peores datos. Es más, solo un 18% reconoce haber adquirido productos alimenticios envasados online.
Pese a todo, no hay que ser pesimistas. El año 2015 ha sentado las bases de la digitalización del sector. Algo que ha propiciado que las compras online de gran consumo experimentaran un crecimiento de más de un 10% respecto al año anterior. Y para 2016 se espera que la tendencia continúe a la alza.
Y es que hay productos alimenticios que sobresalen. Tal es el caso de la alimentación para mascotas: uno de cada cinco españoles compra la comida de sus animales a través de Internet. Principalmente por el peso y el tamaño de lso productos y las incomodidas que su compra presencial acarrea. Además de ser un producto de compra cíclica.
En la otra cara de la moneda se encuentran los productos frescos que consiguen la cifra de apenas un 13%. Pero que no se compren estos productos a través de la red no implica que el proceso de compra no tenga una parte online.
Es más, la mayor parte de consumidores se sirve de webs y aplicaciones para informarse sobre este tipo de productos, así como para buscar ofertas y promociones relacionadas.
“El consumidor está cada vez más conectado y eso significa un comprador cada vez mnás inteligente. Internet es una fuente ingente de información sobre los productos que queremos adquirir, aunque la compra se materialica en un espacio físico. Buen ejemplo de ello son los productos frescos, esenciales en la cesta de la compra de los españoles y con un fuerte componente emocional y sensorial, fundamental para ese 76% que disfruta haciendo la compra. Pero, a pesar de ello, muchos se informan antes sobre estos productos en Internet, especialmente para comparar precios y buscar promociones, precisamente dos de los comportamientos que más se han interiorizado con la crisis y que han llegado para quedarse”, ha explicado Gustavo Núñez, Directo General de Nielsen Iberia.
Los precios de los supermercados online, al alza
Aunque la razón de que los españoles no compren la alimentación a través de canales online no está ligada al precio, su tendencia alcista puede acabar covirtiéndose en una barrera más.
En un estudio realizado por Soysuper a los siete principales supermercados online en España, se desvela que los precios de los productos están experimentando esa tendencia alcista.
A principios de 2015, el aumento anual de precios era del 0,2%. Una cifra que ha ido subiendo mes a mes hasta llegar al 1,1% en diciembre. Y en algunos casos, como en Cuenca y en Guadalajara, el dato supera el 2%. En cambio, en provincias como Lugo y Ávila los precios gbajan por debajo de la media.
En cuanto a las categorías de productos, las que más suben son las de los productos estacionales ( con un aumento del 2,4%), las pastas, legumbres y arroces (con un aumento del 2,2%) y los congelados (con un crecimiento del 1,4%). Mientras que categorías como los productos para mascotas (-2,2%), la perfumería y parafarmacía (-1%) y los cafés, cacaos e infusiones (-0,5%), bajan.
Por otro lado, algunas subcategorías presentan variaciones de precio realmente llamativas como la subida del aceite del 19,4%, la del mensaje de cocina del 8,3% y la de las sémolas del 8,3%.
Subidas que no propician las compras de los productos en Internet. Quizá haya que cambiar de estrategia para mejorar las cifras...