La tecnología en la educación: tabletas, apps y conectividad

La tableta ha llegado a las vidas de muchos como un juguete, pero puede ser mucho más que eso. En las conferencias de los premios TABInnovation hemos podido conocer las tabletas desde otro punto de vista: como máquinas del conocimiento.

La facilidad de uso de las tablets es bien conocida por los padres, que son uno de los grupos que más compran este dispositivo. Pero aún así, seguimos pensando en la tablet como un dispositivo para jugar, tanto niños como adultos. Incluso los padres, que las ven como aparato educativo, quieren aprovecharlas para que sus hijos aprendan a usar dispositivos electrónicos, no para que aprendan contenidos.

 

En las conferencias de los premios TABinnovation nos han demostrado que las tabletas tienen mucho más que ofrecer. Son un aparato educativo con mucho potencial, al que todavía no se le ha dado la importancia suficiente:

 

 

Las apps en la escuela primaria

En pleno siglo XXI, sigue siendo demasiado habitual ver a niños con auténticas maletas llenas de libros camino del colegio. David García, jefe de producto y de negocios digitales de Santillana, cree que esa época tiene que cerrarse.

 

Los niños tienen que aprender a usar la tecnología como una capacidad más y no sólo para jugar. Es difícil para una editorial llegar a esta conclusión, pero Santillana quiere adelantarse al cambio. Por eso ha creado la aplicación Pupitre.

 

Esta aplicación para tabletas está dirigida a niños de educación primaria, y ofrece a los usuarios lecciones de lengua, ciencias, matemáticas... en un formato similar al del juego.

 

 

Por cierto, Pupitre ha ganado el premio TAB innovation a la mejor app infantil y educativa para tablet.

 

 

La tecnología en la educación superior

Internet ha revolucionado la industria de la música, del cine, de la prensa y de los libros. Pero cada sector se ha revolucionado en un momento diferente.

 

Francisco Ruiz, Policy and Government Relations Manager de Google, está convencido de que ahora le toca a la educación. 

 

 

Los MOOCs (Massive Open Online Courses) han cambiado las normas del juego. Se trata de cursos que las universidades ofrecen online de forma gratuita. Son masivos, es decir, se apuntan miles de personas. Y pueden cambiar el panorama de la educación superior por completo.

 

La filosofía de los MOOCs se basa en dos principios:

 

1. Autoaprendizaje: “La Universidad tiene que pasarse de un modelo de tiempo cumplido a un tiempo de cosas aprendidas”, asegura Ruiz. Son los alumnos quienes tienen el material a su disposición y tienen que usarlo para sacarle partido.

Además, no hay una sola forma de seguir el curso. Los foros, redes sociales y materiales interactúan entre sí para permitir al alumno explorar la materia de forma anárquica.

 

2. Conectividad: Los MOOCs rompen fronteras. Son cursos accesibles desde todo el mundo, y ponen el mejor conocimientos en manos de absolutamente todo el mundo. Se trata de una democratización del conocimiento.

 

 

La revolución en el mundo de la educación no acaba aquí. La llegada de los MOOCs ha abierto la puerta a multitud de modelos educativos online.

El siguiente paso es conseguir que no sólo haya miles de alumnos, sino también miles de profesores.