La evolución de los fenómenos demográficos, el impacto de los factores macroeconómicos y la consolidación de las nuevas tecnologías, son los tres ejes que impactarán en el comportamiento del consumidor en 2020.

Así lo recoge el informe “Tendencias de Consumer 2020” elaborado por el Área Consumer Engagement de LLYC.

Según el estudio, el activismo posgeneracional, el reto alimentario, el paradigma poscrisis, el vínculo emocional con las marcas o las búsquedas de información a través de la voz, serán algunos de los elementos a considerar en la relación entre consumidores y marcas.

David González Natal, Socio y Director Senior del Área Consumer Engagement de LLYC, señala que el consumidor contemporáneo no actúa de manera aislada, sino que sus conductas se ven afectadas por el ecosistema y su entorno. "Nuestra oferta al consumidor sólo supondrá una propuesta de valor si somos capaces de detectar las nuevas corrientes y anticiparnos a ellas; para así anticipar nuestra oferta con éxito ante un contexto de constante cambio”, advierte.

Estas son las 10 tendencias que marcarán al consumidor en 2020:

• Consumidor en crisis: La lógica prima en los hábitos del nuevo consumidor. Su reflexión antes de tomar una decisión de compra, es el resultado de haber afrontado tiempos de crisis, pagos de deudas y necesidad de ahorro. El nuevo paradigma poscrisis seguirá actuando como un círculo vicioso, o virtuoso, en el que marcas y consumidores se verán envueltos, reinados por la premisa de consumir.
   
• Foodemic: La comida se transforma de manera progresiva en una discusión con tintes epidémicos, no por su escasez, sino por el crecimiento de las tasas de obesidad en los países del primer mundo, la obsesión por la comida sana o el impacto de la explotación animal en el medio ambiente, entre otros. Estos factores alimentarán en los próximos años las conversaciones sobre la comida con una visión sobre las implicaciones medioambientales, económicas y geopolíticas.

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• Forever Young: Cada vez son más las personas que sueñan con ser jóvenes para siempre. Este comportamiento tiene implicaciones tanto en el consumo como en el desarrollo o aparición de nuevas industrias. El mercado mundial del bienestar creció un 12,8% entre los años 2016 y 2018, convirtiéndose en una industria de 4,2 billones de dólares. Esto constituye una amplia gama de oportunidades para empresas que desean llegar a este tipo de consumidor.
   
• Consumidores Marca: Dispositivos wearables, el Smart Data, la Inteligencia Artificial, el pago contactless, y la omnipresencia de la conectividad, son algunos de los avances tecnológicos que están influyendo en el perfil de los llamados consumidores-marca. Estos avances están convirtiendo a los consumidores en los directores de sus propias experiencias de consumo; y a las marcas, en un set de herramientas para conseguirlo.
   
• La era de la predicción: En un mundo cada vez más centrado en el consumidor, es fundamental la capacidad para identificar tendencias, insights y nuevos comportamientos que permitan diseñar experiencias para satisfacer sus necesidades. El análisis predictivo utiliza la ciencia para predecir lo que sucederá en términos de los deseos de los clientes, hasta cómo funcionará el mercado e importantes tendencias.
   
• Retail Reborn: Muchas marcas han avanzado en el desarrollo de procesos de compra que suponen “una experiencia”. Según LLYC, la clave del éxito minorista en la era digital será dar a las personas una razón para ir a las tiendas y garantizar que tengan una buena experiencia cuando estén allí.
   
• Activismo posgeneracional: El activismo ha sumado cada vez más adeptos, y cada vez más son más los adultos que participan activamente desde sus redes sociales, influyendo en que este no sea solo terreno de jóvenes. El activismo social es, para algunos adultos maduros, una ocupación que permite el uso de su experiencia de vida, habilidades y conocimientos para la transformación social y comunitaria; y que brinda oportunidades para ir más allá de sus ocupaciones tradicionales.
   
• Una nueva calma: La Organización Mundial de la Salud ha catalogado al estrés laboral como una de las enfermedades características del siglo XXI. En 2020, las marcas apostarán por el concepto de "calm marketing". Este enfoque plantea un cambio de paradigma asociado a limitar el exceso de “ruido” que perciben las personas a partir de las estrategias de marketing tradicionales.
   
• Human Search: La tecnología estará realmente omnipresente en la relación del consumidor con las marcas a través de la tendencia que el informe denomina como Human Search: una forma cada vez más natural de realizar búsquedas, tanto a través de la voz como de la imagen.
   
• Consumidores sibaritas: Según un estudio de la EAE Business School, las perspectivas del consumidor de 2030 presentan a un tipo de comprador más refinado, aunque no precisamente con un mayor poder de adquisición. La lucha por la democratización del lujo supone que cualquier persona pueda comprar un determinado artículo, incluso si esto exige que otras variables de su vida se vean comprometidas.

Más info: Tendencias Consumer 2020