Blablacar ha cambiado el algoritmo de su aplicación para favorecer las conexiones más locales y ha renovado su imagen de marca. Todo a la vez. Se trata de un profundo cambio interno de la compañía que refleja la necesidad de adaptarse a un sector en constante transformación como es el transporte.
Nueva identidad corporativa
Blablacar abandona los 3 colores verde, azul y rojo de su antiguo logo y apuesta por 3 nuevas tonalidades. Se trata de un azul y verde claros combinados con un verde oscuro. Además de los colores, la tipografía también evoluciona de una imagen más informal a una nueva más moderna y seria.
Según la propia compañía se trata de apostar por una imagen de marca centrada en reforzar lo que consideran esencial en su servicio: las relaciones sociales. Con este cambio de imagen, la nueva aplicación móvil se quedaría así:
Cambio de algoritmo
En cuanto al cambio de algoritmo, de ahora en adelante Blablacar permitirá a los usuarios seleccionar tanto el punto exacto de salida, como el punto concreto de llegada, en lugar de mantener el actual sistema en el que conductor y pasajeros pactan un punto de encuentro.
En los próximos meses, Blablacar también empezará a sugerir a los conductores posibles pasajeros a recoger durante la ruta entre las dos ciudades del trayecto. Es decir, si hablamos de una ruta Madrid-Santiago de Compostela, con este nuevo sistema, el conductor podría pasar a recoger pasajeros en localidades por las que pasa el trayecto como Medina del Campo o Astorga, por ejemplo.
Con este nuevo algoritmo, Blablacar calcula que podría multiplicar por 10 el número de viajes disponibles al mes desde localidades medianas o pequeñas. Pasaría de los 200 actuales a más de 2.000 y, en consecuencia, aumentaría su cuota de clientes por los que la propia compañía se lleva una comisión que oscila entre un 10 y un 20%.
Jaime Rodríguez de Santiago, General Manager Iberia & Germany en BlaBlaCar, ha explicado que se trata de “reenfocar nuestro producto para poder ofrecer muchas más opciones de viajes a quienes viven lejos de los núcleos urbanos”.
¿Un giro hacia los modelos de negocio Uber o Cabify?
El cambio de algoritmo de Blablacar podría interpretarse como un giro de una empresa que se basa en una iniciativa de economía colaborativa con pasajeros y conductores interesados en compartir los gastos de viaje, hacia una plataforma más orientada al transporte profesional a la carta, algo propio de otras compañías como Uber o Cabify.
Con la diferencia, eso sí, de que los conductores no serían profesionales, sino que seguirían siendo particulares.
Sea como sea, el cambio ya está en marcha y se irá extendiendo a los 22 países en los que opera Blablacar a lo largo de la primera mitad de este año. Se produce apenas 12 años después de la fundación de la compañía en Francia y cuando la plataforma ya cuenta con 60 millones de usuarios en todo el mundo. De ellos 3,5 millones son españoles.