Coca-Cola invierte 920 millones de euros en la competencia de SodaStream

Coca-Cola ve una amenaza para su negocio la competencia de SodaStream. Por eso ha invertido 767 millones de euros en su competencia directa, la empresa Green Mountain Coffee Roasters (GMCR), que cuenta con su propio sistema para elaborar bebidas gaseosas. 

Coca-Cola ha comprado una participación del 10% (920 millones de euros) de Green Mountain Coffee Roasters (GMCR), empresa líder en el mercado de cápsulas de café de especialidad. 


Pero el dato importante que han anunciado en el comunicado es que el acuerdo entre las dos empresas implica el desarrollo de un nuevo sistema de preparación de bebidas gaseosas en casa, al estilo de SodaStream. The Coca-Cola Company ha accedido a permitir que los sabores de sus marcas de bebidas, incluyendo Coca-Cola, Fanta y Sprite, se conviertan en los sabores para el producto Keurig Cold de GMCR.


Mientras GMCR desarrolla la tecnología del sistema, Coca-Cola hará uso de su poder de marketing mundial para impulsar el concepto en mercados de todo el mundo. Ya está desarrollando la primera tirada de productos hehcos con este sistema por GMCR y Coca-Cola. Se espera que esté disponible para los consumidores en 2015.

 

Brian Kelley, Presidente y Director Ejecutivo de GMCR, ha declarado: "Con Coca-Cola como socio estratégico global en nuestro sistema de bebidas Keurig Cold de elaboración en el hogar, creemos que existe una oportunidad significativa para acelerar nuestro crecimiento en la categoría de refrescos al ofrecer a los consumidores una forma innovadora y conveniente para preparar sus refrescos favoritos con sólo pulsar un botón". 


Esta nueva asociación entre Coca-Cola y GMCR para producir el sistema de elaboración de refrescos en casa, supone un fuerte golpe a SodaStream, quien se caracteriza por ese novedoso sistema, pero utilizando un refresco de cola de sabor genérico y no de la marca Coca-Cola. 

 

Se espera que la asociación finalice en marzo. Al conocerse la noticia, las acciones de SodaStream bajaron un 11% en operaciones posteriores al cierre de la Bolsa, mientras que las de GMCR se dispararon un 38%.