La enfermedad del tiempo libre o por qué nos ponemos malos en vacaciones

  • El “leisure sickness” es un malestar asociado a los periodos de descanso del trabajo
  • Se recomienda afrontarlo con ejercicio, meditación, salud del sueño o planificación

Llega el viernes y comienzas a no encontrarte bien. O te vas de vacaciones y en el primer día te invade el malestar. Si has experimentado esto, ya sea una vez o de manera repetida y habitual, puede ser que padezcas lo que se ha denominado como “leisure sickness”, algo así como la enfermedad del tiempo libre, un fenómeno que afecta especialmente a los profesionales que no suelen tomarse descansos o que no logran desconectar de sus trabajo. 

Se trata de una condición que sufren miles de personas en todo el mundo pero que no está universalmente reconocida. Es más, muchos expertos niegan que sea real, mientras que otros argumentan que se trata de un situación que, considerando el acelerado ritmo de vida actual, afecta cada vez a más personas. Pese a todo, existen investigaciones al respecto desde hace más de dos décadas. 

Dolor de cabeza, fatiga o náuseas se encuentran entre los síntomas más comunes

Concretamente, en 2002 el psicólogo clínico Ad Vingerhoets realizó un estudio al respecto y publicó sus resultados en el portal de investigación de la Universidad de Tilburg. Preguntó a casi 1.900 personas sobre el desarrollo de síntomas en periodos de descanso y determinó una serie de síntomas comunes: dolor de cabeza, migrañas, fatiga, dolores musculares y náuseas. En algunos casos también se apuntó a infecciones, como las atribuidas a resfriados o gripes. 

La gran mayoría de los participantes aseguraron padecer la enfermedad del tiempo libre durante más de 10 años y su aparición se asoció con condiciones estresantes. En general, se atribuye su aparición a la transición del trabajo al descanso, al estrés asociado con los viajes y las vacaciones, o a cuestiones como a la carga de trabajo y las características de personalidad.

Como conclusión a la investigación, Vingerhoets estableció que el “leisure sickness” es una afección relativamente común y una variedad de causas. En general, el desarrollo de la condición está relacionada con una mayor resistencia a las enfermedades cuando se está bajo estrés agudo, y que disminuye cuando el estrés se reduce. Tal vez los dolores y molestias que han pasado desapercibidos bajo estrés se notan más una vez que se inicia el periodo de descanso; o el estrés genera una adrenalina que puede afectar al sistema inmune

La investigación, además, apunta a que esta condición puede afectar más a aquellas personas con adicción al trabajo, a las personas perfeccionistas muy dedicadas a sus tareas profesionales; o las personas con fijación por la excelencia o la búsqueda de la mejora constante en su puesto de trabajo. Este tipo de perfiles pueden sufrir la condición de forma más grave o con mayor frecuencia. 

Con todo, afrontar la posible aparición de la enfermedad del tiempo libre puede abordarse desde diferentes facetas. Por un lado, los expertos recomiendan realizar ejercicio físico, ya sea el viernes antes del fin de semana o antes de coger las vacaciones, para equilibrar la adrenalina y facilitar el proceso de relajación. Por otro, aconsejan una buena salud del sueño, ya que sin el descanso adecuado el sistema inmune tiene menos capacidad de proteger el cuerpo frente a enfermedades. 

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También aconsejan cuidar los hábitos asociados comúnmente al verano, como el exceso de comida y bebida, o trasnochar. El alcohol, la cafeína y una dieta poco saludable pueden afectar la salud inmunológica, lo que aumenta las probabilidades de enfermarse. Además, consideran ventajoso planificar los descansos, añadiendo un dia al comienzo y otro al final del viaje, para favorecer la relajación y la recuperación gradual. Por último, en un plano más psicológico, los expertos recomiendan la meditación y revisar la manera de enfrentarse al estrés y al trabajo. 

El objetivo de todo, especialmente si se ha observado un patrón respecto a la aparición de malestar en periodos de descanso, es afrontarlo de manera consciente y responsable para preservar el bienestar. Saber que nuestro cuerpo puede ser víctima de este tipo de episodios nos facilitará poner medidas para disfrutar de las vacaciones de manera adecuada y fructífera.