Varios investigadores de la Universidad de Florida, la Universidad del Estado de Míchigan y la Universidad de Washington han realizado un estudio para descubrir los efectos que tiene el uso del smartphone en la productividad de las personas.

Aunque más de la mitad de los adultos estadounidenses tiene smartphone y considera que es una herramienta sin la cual no podría vivir porque les hace ser más productivos, la realidad está muy lejos de su opinión.

Los datos de este estudio han revelado que los móviles son uno de los factores más importantes que influyen negativamente en el descanso y, por consiguiente, en la energía para afrontar el siguiente día laboral. También se ha comparado la influencia del móvil respecto a otros aparatos electrónicos: su uso tiene un efecto en el descanso mucho más negativo que el de la televisión o el ordenador.

“Los smartphone están perfectamente diseñados para interrumpir el sueño. Nos mantienen enganchados hasta altas horas de la noche y hacen que resulte difícil separar el trabajo de este hábito y conciliar el sueño”. - Russel Johnson, responsable del estudio.

Los datos del estudio han sido obtenidos a partir de dos encuestas diferentes. La primera estuvo dirigida a 82 profesionales con puestos de alto mando. En la segunda entrevistaron a 161 empleados con profesiones muy dispares: desde enfermeras hasta contables. 

El estudio de estos investigadores ha dado a conocer que aquellos que usan el smartphone a partir de las 21:00 horas, al día siguiente rinden peor en sus trabajos. Además, según la Fundación Nacional del Sueño, sólo el 40% de los americanos duerme lo suficiente y citan el móvil entre las principales causas de este hecho. 

Los fabricantes de dispositivos móviles siempre buscan las formas para fomentar el uso de los mismos. La luz azul que emiten muchos smartphones es una de esas tácticas. La tonalidad de azul que usan anula la melatonina, una sustancia química producida por el cuerpo y que ajusta los desórdenes del sueño.

Entonces, ¿consultar el mail por la noche o esperar al día siguiente?

Está en la mano de cada uno decidir cuál de las dos opciones tendrá consecuencias más favorables para la propia productividad...