Una ciudad ideada para convertirse en un campo de pruebas tecnológicas, y que además sea sostenible. Así ha imaginado Toyota la ciudad del futuro, visión que ha presentado en CES 2020.
La ciudad ocupará cerca de 70 hectáreas y comenzará a construirse a finales de 2020
Pensada como un laboratorio para el testeo de coches autónomos, robots e inteligencia artificial, la urbanización abarcará alrededor de 70 hectáreas en un terreno de una antigua fábrica, donde aproximadamente 2.000 residentes e investigadores podrán vivir a tiempo completo.
Situada en las cercanías del Monte Fuji, en Japón, la ciudad llevará el nombre de Woven City o Ciudad Entretejida en conmemoración a los orígenes de la empresa como fabricante de telares.
En colaboración al arquitecto danés Bjarke Ingels y su estudio BIG, la ciudad ha sido diseñada para reducir a cero las emisiones de carbono, gracias a su capacidad de alimentar sus necesidades eneréticas con células de combustible de hidrógeno.
Los edificios serán de madera para minimizar la huella de carbono, los tejados dispondrán de placas fotovoltaicas para aprovechar la energía solar y solo se permitirá la circulación de coches autónomos.
Además de ser completamente sostenible, esta ciudad, que comenzará a construirse a finales de este año, utilizará internet para prácticamente todas las funciones de la vida cotidiana de sus pobladores.
La propuesta está abierta a la colaboración de otras empresas, que pueden acercarse a Woven City y utilizarla como una incubadora de proyectos innovadores.
