Una vez más la publicidad de Netflix no deja indiferente a nadie. Ya sea por jugar con el albur o por hablar sin tapujos de política y, sobre todo, de uno de los temas más candentes y controvertidos de la opinión pública española desde hace meses: el procés catalán.
¿Cómo acabar con la guerra de las banderas?
Para promocionar la última temporada de la serie “Black Mirror”, Netflix ha presentado un spot en el que habla de su particular manera de acabar con la guerra de banderas: usar Smart Lens.
Se trata de unas lentillas inteligentes que ayudan a "adaptar el mundo exterior para armonizarlo con tu interior”. Una situación que popularmente definiríamos como “ojos que no ven, corazón que no siente”. El caso es que estas lentillas, que recuerdan a la tecnología que sale en el capítulo “Tu historia completa” de “Black Mirror”, permiten que donde hay una estelada colgada de un balcón, el no independentista vea una bandera española, LGTB, pro paz, o de cualquier otro tipo dependiendo de su particular ideología y pensamiento.
Antecedentes políticos y polémicos
No es la primera vez que Netflix tira de política española para promocionar “Black Mirror”. Hace apenas una semana sorprendía con este otro vídeo en el que entrelazaba frases del Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y las cargas policiales del pasado 1 de octubre en Cataluña, con imágenes de robots y otras tecnologías que recuerdan a su serie de producción propia.
Si nos remontamos más atrás en el tiempo, recordaremos otras campañas polémicas de Netflix como “Sé fuerte. Vuelve Narcos”, el “No te pases de la raya” o el también conocido "Yo soy español" (tachado) para promocionar la película "Fe de etarras".
Una estrategia publicitaria que busca notoriedad de marca a través de la controversia y que, a juzgar por los datos de inversión en publicidad de Netflix, parece estar funcionando. La plataforma de vídeo en streaming ha gastado más de 1.100 millones de dólares en publicidad en 2017 frente a los 842 millones de dólares que invirtió en 2016. Es más, la previsión para este 2018 es que el presupuesto de Netflix en marketing siga creciendo. Y eso mientras va definiendo y perfilando todavía más su particular estilo de acercarse al consumidor final.
