El diario británico The Guardian sigue los pasos del diario sueco DAGENS ETC y deja de aceptar publicidad de combustibles fósiles. Según apuntan en un editorial, la decisión responde a su compromiso para frenar la “crisis climática urgente” a la que se enfrenta el planeta.

El compromiso de The Guardian con el planeta

“Los principales científicos del mundo nos dicen que tenemos solo doce años para cambiar el comportamiento humano y evitar una catástrofe”, escriben. Para el periódico se trata “del desafío más importante de nuestros tiempos” y por eso han decidido sumarse a la lucha contra el cambio climático con distintas acciones.

Como resultado, mantienen que ahora las inversiones de este tipo representan menos del 1% de sus fondos totales, y  que "muchos de los administradores de fondos con los que trabajan dicen haber creado fondos de inversión nuevos y más ecológicos como resultado de esa decisión". Aseguran que lo han hecho primero “liderando con experiencia y urgencia” la cobertura de las marchas "Fridays For Future" y de crisis climáticas como los incendios en Australia. También afirman haber adoptado  un “lenguaje más urgente” para describir la emergencia climática, por decisión de la editora en jefe Katharine Viner en mayo de 2019 así como haber excluido las aportaciones de empresas relacionadas con combustibles fósiles de los fondos de inversión de Guardian Media Group. 

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Para "ser fieles a sus valores", aseguran, han dado este siguiente paso de no aceptar más publicidad de compañías de extracción de combustibles fósiles en ninguno de los sitios web y aplicaciones de The Guardian: "ni en Guardian, Observer y Guardian Weekly en su edición impresa". "Nuestra decisión se basa en los esfuerzos de décadas de muchos en esa industria para evitar acciones climáticas significativas por parte de los gobiernos de todo el mundo". explican.

Y aunque reconocen que a algunos de sus lectores les gustaría que fuesen más allá, prohibiendo los anuncios de cualquier producto con una importante huella de carbono, como los coches, admiten que "detener esos anuncios sería un duro golpe financiero y podría obligarnos a hacer recortes significativos en el periodismo de The Guardian y The Observer en todo el mundo".

La publicidad en The Guardian

Desde el medio de comunicación apuntan que la publicidad siempre ha sido una parte vital para apoyar el periodismo en The Guardian. Representaba aproximadamente el 40% de sus ingresos el año pasado y avanzan que esperan "seguir trabajando con los anunciantes para mantener su periodismo abierto a todos".

Escriben incluso que "una buena publicidad, realizada de manera responsable, puede ser positiva para la economía y el mundo, además de proporcionar una forma importante de sostener el periodismo de The Guardian". Por eso avanzan que continuarán aceptando "otras formas de publicidad".

Reconocen  además que el "periodismo de alta calidad sigue en crisis" con las ventas de periódicos en papel cayendo y "el dominio de las plataformas digitales que absorben la gran mayoría de la inversión publicitaria". De ahí que pidan la ayuda económica de sus lectores.

El editorial termina diciendo: "Es cierto que rechazar algunos anuncios puede hacer que nuestras vidas sean un poco más difíciles a muy corto plazo. No obstante, creemos que construir una organización más decidida y mantenerse financieramente sostenible debe ir de la mano".