Un medio de comunicación recibe al día cientos de notas de prensa y comunicados en la bandeja de entrada en su correo electrónico. Un asunto impactante, un titular atractivo o un email bien redactado y estructurado pueden ser algunos de los elementos que ayuden a atraer el interés del equipo editorial y abrir las puertas para que la información termine publicándose. Sin embargo, Renfe ha demostrado en su relación con los medios que puede haber creatividad más allá del texto.
Renfe ha trasladado la problemática a la propia comunicación con los medios
El operador ferroviario buscaba informar hace unos días del impacto de la vandalización con pintura de los trenes tanto en la actividad diaria de la propia Renfe como en los gastos directos e indirectos asociados. Para ello, no se limitó a enviar una nota de prensa al uso con información relevante, sino que trasladó la problemática a la propia comunicación.
Así, el Gabinete de Prensa de Renfe hizo llegar a los medios una nota de prensa grafiteada en la que la pintura impedía leer con claridad el texto. El objetivo era concienciar y poner de relieve el grave problema que supone este tipo de vandalismo. “En cierto modo, le preguntábamos a los medios, ‘¿Qué os parecería que se hubiera grafiteado esta nota?’, ‘¿Verdad que no se podría entender casi nada?’”, explican desde la compañía a Reason.Why. Pasados unos minutos, el operador compartió con los medios la misma información sin vandalizar y perfectamente legible.
El operador ferroviario asegura que el vandalismo grafitero de sus trenes generó un coste de 25 millones de euros durante el año pasado. La limpieza constituye el principal gasto, sin embargo apunta que se generan gastos indirectos vinculados a la inversión en seguridad, tanto en personal como en otros sistemas de videovigilancia. Además, indica que la vandalización implica retrasos, supresión de trenes por carencia de visibilidad o dificultades para circular por obstrucción de los elementos de señalización por la pintura.
En 2022 se pintaron cerca de 80.000 metros cuadrados de superficie de trenes
La compañía ha compartido algunos datos que reflejan el impacto de los grafitis en su actividad, entre ellos, que durante el año pasado se pintaron cerca de 80.000 metros cuadrados de superficie de trenes. Asegura también que se denunciaron 3.559 intrusiones de grafiteros -lo que supone una media de 10 actos de este tipo al día- y que se invirtieron 10.500 horas de trabajo a la limpieza de trenes.
Desde Renfe, además, afirman que la pintura empleada está compuesta de sustancias tóxicas como el benceno o el 1,3-butadieno, que comportan efectos negativos tanto para el medio ambiente como para la salud de los viajeros. Asimismo, comparten que la limpieza de los grafitis requiere la movilización de los trenes hacia los centros de limpieza, lo que supone un consumo eléctrico de aproximadamente 400.000 Kwh. Una cifra que equivaldría a mantener 36 millones de bombillas encendidas durante una hora.